domingo, 18 de marzo de 2018

LA DISOLUCIÓN DE LA FUERZA ARMADA NACIONAL BOLIVARIANA (fanb)



José Machillanda hizo una reflexión sobre un tema de actualidad que ha significado la detención y persecución de un importante número de oficiales. Este tema es el de la revuelta militar. Según él esta revuelta “que sin ser Golpe de Estado” se expresa como “insurrección, amotinamiento y anarquía de oficiales superiores, oficiales subalterno suboficiales y tropas que sufren y padecen la miseria exponencial”. La consecuencia que le atribuye a este hecho es la pérdida de control, por parte de la tiranía, del cuerpo armado, digamos de una manera importante, amenazando con ello la efectividad del próximo Plan República a aplicarse en la deslegitimada votación del 20MAY.
Hay dos cosas que me interesan destacar: por una parte, el concepto de revuelta usado por el autor y por el otro, la fecha límite del 20MAY y otro aspecto que se deriva de la revuelta en sí que es la “carencia de comando en el cuerpo armado” debido a que ambas apuntan a una misma transición política pero producida en dos tiempos diferentes.
La revuelta militar
Con respecto a la revuelta entendida como “insurrección, amotinamiento y anarquía”, es de mencionar que a pesar de la gravedad de la situación planteada hay que tener presente el impacto que genera en la capacidad organizacional para cumplir con la misión constitucional en sí. En este sentido adelanto que la fanb está estructura para defender el orden político tiránico basado en el mantenimiento de un modelo de desarrollo (socialista) y no para cumplir con la constitución instrumentada por el mismo orden político. Teniendo esto presente, las preguntas que se plantean es si esta fanb está en capacidad de mantener el orden político en las actuales condiciones y cómo esa ‘revuelta’ los afecta. Las palabras ‘insurrección’ y ‘amotinamiento’ sugieren la existencia de una estructura a no ser que ambas se presenten de manera generalizada. En el primer caso la fanb puede responder como aconteció en el año 1992 para mantener un cierto grado de eficacia en relación con el sostenimiento de la tiranía por presumir que la situación es parcial. En el segundo caso, es muy difícil saberlo, pero la cantidad de militares detenidos y las solicitudes de bajas por parte de los miembros de la institución militar son indicadores que evidencian una tendencia.
Por otra parte, la palabra ‘anarquía’ que pareciera indicar perdida de la disciplina y todo lo que ello trae consigo dentro de una estructura militar es la que me interesa mostrar debido a que refleja una situación entrópica provocada por causas externas a la institución militar en el sentido que se produce por la propia estructura de la tiranía y de la sociedad venezolana e interna de la propia institución.
En el primer caso, la estructura militar está sometida a la presión provocada por la misma tiranía al tratar de imponer por la fuerza un modelo de desarrollo que ha reducido la capacidad del militar para dedicarse a su profesión o para cumplir las tareas a-profesionales que la propia estructura le ha encomendado. Esta presión a la que ha respondido la sociedad haciendo resistencia puso a la institución militar frente a la contradicción de ir contra unos ciudadanos que constitucionalmente debe proteger con el agravante que la misma tiranía ha desarrollado leyes inconstitucionales que pueden declarar ‘enemigos internos’ a los propios venezolanos. Todo esto ya se sabe. El problema se presenta dentro de lo que queda de institución militar cuando desde su mismo seno se presiona a los militares para cumplir tareas constitucionales e inconstitucionales. Esto nos lleva al segundo caso.
En lo interno la tiranía y sus representantes dentro de la misma estructura están haciendo esfuerzos importantes para mantener la cohesión organizacional, pero mediante coacción. La coacción se basa en una relación premio-castigo, pero el premio no existe, no es premio un ascenso (en grados inferiores al generalato) o una bolsa ‘clap’, esos instrumentos se han convertido en un mecanismo de extorsión donde se observa de manera más cruda el castigo. Me interesa el castigo y una de sus variantes: la exclusión y, consecuentemente, la humillación relacionada con la purga militar. Ya en una anterior oportunidad me referí a la purga militar[1]. En ese entonces indiqué que la tiranía venezolana estaba siguiendo el modelo soviético, pero la Rusia del año 1921, ni la de 1937 no es la Venezuela de 2018. El ejército Rojo, al igual que el cubano, surgió de una guerra civil seguida de un proceso de profesionalización de acuerdo con las prácticas de la guerra de su periodo histórico. Las fuerzas armadas soviéticas del año 1937, gracias a la reforma de Mijaíl Tujachevski, eran muy grandes, muy modernas y muy profesionales, y a decir de Aníbal Romero, las más poderosas del mundo, y capaces, como lo demostraron, de resistir una purga de enorme dimensiones. Si las fuerzas armadas rusas pudieron sobrevivir y resistir el embate de la blitzkrieg en el año 1941, después de la purga iniciada en el año 1937, fue porque eran muy grandes, modernas y profesionales.
La fanb al contrario es heredera del partido y ejercito pretoriano formado por Juan Vicente Gómez para perpetuarse en el poder que recuperó su esencia inicial luego de que fuese ‘capturada’ por la clase dirigente del pacto de Punto Fijo. La fanb no es muy grande a pesar de invocar continuamente la unión cívico-militar. Históricamente se ha dicho que muchos hombres ingresaron a los cuarteles para tener seguro alimento y vestido y eso parece que no está ocurriendo en estos momentos y si ocurre es bajo coacción, como ya he indicado. La fanb no es moderna en el sentido que dados los avances en el modo de hacer la guerra en la actualidad decidió implantar un modelo del pasado basado en la ‘guerra popular prolongada y de resistencia’ sin ni siquiera poseer, el régimen tiránico, una base productiva de bienes para prolongarse en el tiempo ni para resistir. Ciertamente posee equipos medianamente avanzado de defensa aérea, pero el medio, por sí solo, no define la capacidad de una estructura. La fanb no es profesional debido a que la ‘profesión’ históricamente ha estado dirigida a una actividad específica, la defensa, y en la actualidad, además de reprimir a la sociedad, en general, se dedican a un sinfín de tareas que las han desnaturalizado y desprofesionalizado en su ser, como he indicado, desde una perspectiva ontológica[2].
En estas circunstancias, la palabra ‘anarquía’ expresada por Machillanda se corresponde con ‘disolución’, como ya indiqué en su oportunidad[3]. Por supuesto que los regímenes totalitarios han dispuesto en el pasado de mecanismos para evitar la disolución, es decir, el pelotón de fusilamiento como ocurrió en la república española sobre todo desde la ofensiva del Ebro, el ejército ruso hasta la batalla de Kursk y el ejército alemán en el año 1945. Pero desde la caída de la cortina de hierro y la disolución de los regímenes totalitarios en la Europa oriental en 1989 no se ha encontrado un mecanismo que pueda detener la disolución de una fuerza armada.
Vistas así las cosas, la disolución de la fanb viene provocada por el propio régimen desde el mismo momento que han necesitado aumentar los grados de coacción interna para sostener su plan estratégico de acuerdo con el foro de São Paulo. El problema de su disolución es, como indiqué, la existencia de diversos grupos armados que coexisten con ella, como ya he indicado antes, dentro de un contexto de transición que apunta de manera acelerada a la implantación de un estado comunal[4]. Teniendo presente esta situación, indiqué que si la fanb no es capaz de cumplir con la tarea encomendada por el proyecto saopaulista “la milicia y los grupos armados paramilitares pueden actuar obedeciendo al comando central político,…, y enlazar con los otros grupos armados que operan en la frontera del país”, como la FARC disidente y otros grupos armados que operan en Colombia. Sin embargo, esos grupos todos reunidos son muy pequeños para controlar un país de más de veinte millones de habitantes aun aplicando un terror desmedido.
La disolución de la fanb nos lleva, de forma reiterativa, al tema del control de las armas de la república y del empleo de la fuerza. Lo primero para que no caiga en mano de bandas delincuenciales y/o grupos subversivos dentro y fuera de Venezuela. Lo segundo implica la neutralización  de todos los grupos armados que estén al margen de la constitución y que fueron organizados por la tiranía. Esto nos plantea el interrogante de saber con qué se cuenta. De los cuatro componentes de la fanb se tiene lo siguiente: la forma en que se ha manifestado la disolución en la armada y en la aviación han sido las bajas del servicio por lo que se observa una aparente cohesión que en términos de control de armas significa que su mantenimiento es factible. Los focos de indisciplina y la represión han afectado la cohesión en el ejército y la guardia nacional. Pero de forma más notoria en el ejército. Por qué el ejército. Por su histórica inclinación pretoriana cuya máxima expresión fue el Movimiento Bolivariano Revolucionario[5]. Históricamente en Venezuela y en especial en el ejército y hasta el presente no se había presentado la disolución, más bien ha sido la fragmentación. Ello explica los golpes de Estado en el pasado. Pero en estos golpes de Estado siempre hubo un control de armas. En cambio, lo que estamos viviendo es, como se dijo, una purga iniciada por la tiranía que explica el fenómeno de disolución y crea las condiciones de posibilidad de perder el control sobre el parque de armas.
La disolución es la expresión de la válvula de escape que están aplicando los miembros del ejército para evadir la presión a la cual están sometidos. Eso va a generar un vacío que debe ser considerado para resguardar el arsenal militar venezolano y para generar las condiciones de posibilidad para instrumentar una nueva estructura que neutralice a los grupos armados paramilitares. Sin embargo, el vacío nos lleva a la fecha del 20MAY.   
El 20 de mayo como acontecimiento.
La fecha 20MAY se hizo referencial desde el mismo momento que lo programado para ese día, si se concreta efectivamente, se realizaría con una semana de diferencia de las elecciones en Colombia uno de los focos de atención del foro de São Paulo. En este contexto, Machillanda señaló la “carencia de comando en el cuerpo armado” que hace suponer que hay un cuestionamiento de la capacidad organizacional para cumplir su función constitucional de defensa y de seguridad no solo para esa semana crucial sino desde que comenzaron a aparecer brotes de indisciplina a finales del año 2017. En la carencia de comando es donde se puede expresar el vacío, por lo que este se puede presentar en cualquier momento y no necesariamente en ese día que es visto por muchos venezolanos como crucial. El vacío puede ocurrir antes o después.
Si se considera que una organización es un acto con un propósito específico, en nuestro caso, la defensa de un modelo de desarrollo impuesto de manera ilegal y que rechaza la gran mayoría de los venezolanos habría que imaginarse las características de ese vacío a la luz de la estructura existente. Ya he señalado que la organización operativa de la fanb es fractal y se evidencia en las REDI’S, ZODI’S, etc. La disolución afecta a esa estructura en el sentido que convierte a esos entes en islas limitadas para apoyarse mutuamente a menos que se haga un enorme esfuerzo logístico no sólo para trasladar medios sino también para sostenerlos en el lugar donde sean desplazados.
Así pues, junto con la carencia de comando está también la reducción de la capacidad logística. Ambas pueden estar correlacionadas o no. La carencia de comando, que implica un conjunto de deficiencias relacionadas con la capacidad de dirigir hombres, está agravada porque las crecientes limitaciones logísticas apuntan a una mayor exigencia. Ello explica la coacción en lo interno de la fanb y la disolución porque los dos fenómenos se están presentando de manera simultánea. Pero estos no son fenómenos nuevos. Lo que son nuevas son las circunstancias por lo que si se mantiene el ritmo de la purga, el régimen podría conseguir lo que pudiera estar buscando que no es más que adecuar la fanb al nuevo estado comunal lo que supondría el paso de la estructura actual al de una fuerza armada comunal soportadas por ‘asesores’ cubanos, las milicias (que también han estado sufriendo un proceso de disolución) y los cuerpos paramilitares que supondría una reducción de costos. Si se adelanta la disolución de manera natural o inducida a la tiranía se la va a dejar sin el soporte para poder alcanzar el objetivo político de naturaleza comunal que van a tratar de imponer. Así pues, la disolución que se está produciendo dentro de la fanb es producto de la aplicación del plan desarrollado por la tiranía para tener control total de esa organización para asegurar la supervivencia del proyecto político. En ese contexto, la actual crisis está siendo aprovechada para ello.. 
Teniendo esto presente, la capacidad disuasiva que ha mantenido a la tiranía se funda en que en caso de una acción militar externa o un desmoronamiento interno se reproduzca el modelo iraquí o libio. Frente a esta situación se presentan las siguientes opciones:
                         I.        Preservar la fanb en sus condiciones actuales, pero ello es inconstitucional por el alto grado de politización, por haber establecido un conjunto de estructuras no previstas en la constitución y es inviable desde el punto de vista de las necesidades de los venezolanos por haberse salido de su propósito fundamental.
                       II.        Regresar a la situación anterior al año 1998, pero ya su organización, que era de naturaleza pretoriana, reproduciría los mismos males que han llevado al país a la situación actual.
                      III.        Acelerar la disolución de la fanb como medio para crear las condiciones de posibilidad de construir una estructura de defensa que satisfaga las necesidades de los venezolanos.
                     IV.        Aceptar la imposición de la tiranía que creo no está planteado.
La opción III eliminaría la posibilidad de que la tiranía concrete su propósito pero nos expondría al intento de implantación del modelo iraquí o libio, pero nosotros no estamos expuesto a una situación religiosa, civilizacional o racial como lo que acontece en Irak ni estamos expuestos a una lucha tribal como acontece en Libia. Nuestro problema se circunscribiría a una lucha subversiva de considerable importancia realizada por individuos acorralados y desprestigiados por las causas que todos conocemos y que temen su exposición a la justicia. Creo que ese paso es inevitable. La manera menos cruenta y eficaz de llevarlo a cabo es,
·         Manteniendo la estructura de legalidad y legitimidad. Es decir, el régimen actúa de manera tiránica y no se le puede permitir que salga de ese estado mediante la colaboración o la sumisión. El centro de gravedad está representado por la legalidad y legitimidad. Eso fue lo que perdió la tiranía en Venezuela. Solo les queda el poder y la fuerza. Un cambio político con la legalidad y la legitimidad, como están dadas las condiciones, puede hacerse con los medios disponibles para erosionar la capacidad de acción del régimen y garantizar así que la defensa de la nueva república se haga con bases firmes. Cómo lograrlo: mediante una estrategia del enjambre[6].
·           Haciendo un diagnóstico (in situ) de la estructura de inteligencia, del comando estratégico operacional y de los otros cuerpos de seguridad de la tiranía.
·           Estableciendo un aparato de captura que permita la utilización de los fragmentos de la fanb que hayan quedados aislados y fuera del control durante el acontecimiento, es decir, en el momento en que se produzca el vacío que impida el cumplimiento de la misión impuesta por la tiranía.
·           Haciendo que cada componente recupere su autonomía funcional y administrativa, pasen a un profundo proceso de reestructuración que posibilite la ejecución de acciones antisubversivas y se integre con el mundo dónde cumplirá sus funciones formales.
Cumpliéndose estas condiciones creo que si sería posible el apoyo internacional.





[1] Ver al respecto: “ANALOGÍA ENTRE LA REVOLUCIÓN RUSA Y EL FIN DE LA REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA: ESCENARIOS PROSPECTIVOS” en: http://edgareblancocarrero.blogspot.com/2017/05/analogia-entre-la-revolucion-rusa-y-el_43.html
[2] Ver al respecto: “EL NUEVO SER-MILITAR VENEZOLANO EN LA NUEVA VENEZUELA REPUBLICANA” en http://edgareblancocarrero.blogspot.com/2017/06/el-nuevo-ser-militar-venezolano-en-la.html
[3] Ver al respecto: “EMPLEO DE LA FUERZA Y TRANSICIÓN POLÍTICA: HACIA UNA VENEZUELA REPUBLICANA” en: http://edgareblancocarrero.blogspot.com/2017/04/empleo-de-la-fuerza-y-transicion.html
[4] Ibíd.
[5] Eso no excluye a la armada en 1913, 1958, 1962 y 2002, ni a la aviación en 1958 y 1992.
[6] Ver al respecto: “T. E. LAWRENCE Y LA ESTRATEGIA DEL ENJAMBRE” en: http://edgareblancocarrero.blogspot.com/2018/01/t-e-lawrence-y-la-estrategia-del.html

domingo, 4 de marzo de 2018

PANORAMA ESTRATÉGICO NAVAL VENEZOLANO (Entrevista completa)



http://arengadigital.com/dr-edgar-blanco-parte-i-debil-defensa-naval-ha-dejado-a-venezuela-como-una-manipulable-ficha-geoestrategica-en-el-tablero-internacional/


1.               En el año 2013, usted comentó que la expansión naval de Rusia iniciada después de la crisis de los misiles en Cuba en el año 1962. Nos podría comentar este proceso y sus consecuencias en la actualidad global más resaltantes.
La Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) emergió como una potencia epirocrática de alcance global después de la Segunda Guerra Mundial, pero para que fuese realmente global debía lograr desarrollar una capacidad para hacer presencia de forma permanente en todo el globo y de eso se dio cuenta cuando tuvo que ceder en Cuba en la crisis del año 1962 cuando intentó establecer unas plataformas de lanzamiento de mísiles balísticos de alcance intermedio dentro del marco de la guerra fría. Con este fracaso, iniciaron un intenso programa de desarrollo naval que convirtió a la URSS en la segunda potencia naval del globo una década después, pero ello significó, por una parte, que tuvieron que dedicar más del 10 % de su PIB para gastos de defensa y, por la otra, que después de una década tuvieran que sentarse a negociar con EE.UU. los famosos tratados de limitación de armas nucleares. Después de la invasión de Afganistán y el recrudecimiento de la guerra fría a inicios de los años ochenta del siglo pasado se produjo entre las grandes potencias una carrera armamentista que la URSS no pudo continuar después del gran esfuerzo desarrollado en las décadas anteriores. Ello se tradujo en las políticas de transparencia y reestructuración que al final desembocaron en la caída del muro de Berlín y del propio colapso soviético.
Un país con sentido de la historia, Rusia, la potencia emergente que se erigió de ese colapso se recuperó en casi dos décadas dentro de un nuevo escenario global caracterizado por el desencadenamiento de una conflictividad de alcance global por la emergencia de un nuevo orden político que se está configurando. Este escenario de conflictividad está dado por el hecho que el carácter hegemónico de EE.UU. puso en jaque un orden westfaliano que se había sostenido por espacio de tres siglos y medio aproximadamente. El orden westfaliano es el que instituyó formalmente la figura del Estado-nación en el tratado de Paz de Westfalia que puso fin a la Guerra de los Treinta Años, una guerra civil alemana que su impacto se extendió por todo el mundo conocido.
Con la puesta en jaque señalada, han surgido, por una parte, movimientos anti-westfalianos que buscan el establecimiento de un nuevo orden: aquí se destaca el foro de São Paulo y los movimientos islamistas en sus diversas variantes. De igual forma, la misma posición hegemónica estadounidense puede ser vista como una situación anti-westfaliana, algo muy similar a lo que vivió España entre el reinado de Carlos I y Felipe III. Por otro lado, está los países que buscan la recomposición del orden westfaliano en otras circunstancias y aquí es donde se ubica Rusia y también China. Podríamos agregar otros países como India, Brasil y aquellos que buscan un puesto permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU (Alemania, Japón, Italia, Sudáfrica…). Al Reino Unido (UK) lo menciono aparte debido a que junto con la Commonwealth se está erigiendo como otro polo de poder global en nuevas circunstancias. Así pues, se está estructurando cuatro polos: EE.UU, China, Rusia y UK. La pregunta que surge es cuál es el espacio de confrontación y mi respuesta es: aquellos espacios donde el hombre sólo puede estar por intermedio de una plataforma adecuada, es decir, los espacios marítimos, aéreos, ultraterrestres y electromagnéticos (podríamos agregar la Antártida por ser aun una inhóspita tierra de nadie). Yo los llamé originalmente espacios abstractos.
Dentro de este marco Rusia se ha enfocado en desarrollar sus capacidades de proyección y defensa en esos espacios de una forma eficaz logrando recuperar una importante presencia en sus áreas de interés. El momento culminante que marcó su retorno a la competencia global, o mejor dicho a la diplomacia armada fue cuando logró detener a EE.UU en Siria durante la crisis desencadenada por el empleo de armas químicas dentro del marco de la guerra civil que desangra al país del cercano oriente. A partir de allí, Rusia ha estado presente en la escena global donde puede contar con un punto de apoyo para sostener operaciones de cualquier naturaleza siempre y cuando no se llegue a una guerra generalizada.
2.               Usted también aseguraba en ese año que al parecer estaba perfeccionando para su propio beneficio su presencia marítima para “mediar” en un hipotético escenario de confrontación chino-estadounidense. ¿Hay similitudes con la intrincada política de Trump, Xi Jinping y Putín?
Como se sabe, la doctrina de seguridad nacional de EE.UU de este año (doctrina Trump) coloca a Rusia y China como principales adversarios de Norteamérica con el agravante de que estos países han logrado hacer una importante presencia en el continente colocando a Venezuela y Cuba (podríamos incluir a Nicaragua) como los principales focos de desestabilización. China es el país que ha invertido más en la región pero aún no tiene una capacidad de proyección militar para poder defender sus intereses aunque están trabajando muy duro para ello. Dos ejemplos se pueden mencionar: el proyectado canal interoceánico nicaragüense y la estación de monitoreo espacial en Argentina. En el año 2013 fue que en el continente comenzaron a verse buques de guerra chinos en visitas diplomáticas. Rusia, en cambio, tiene una débil infraestructura para sostener operaciones de todo tipo en el área, en Cuba y como se observó en las recientes reuniones cubano-rusas enmarcadas públicamente en asuntos petroleros y estratégicos creo que van a incrementar sus capacidades. Pero estas apuntaran a lograr sostener operaciones en procesos de negociación coercitiva, no para sostener operaciones militares de gran envergadura como lo están haciendo en Siria.
Desde el punto de vista estratégico, Rusia enfrenta el mismo problema que tuvieron los alemanes en las dos guerras mundiales y UK para operar en el continente especialmente en Iberoamérica, es decir, puede perturbar la normalidad en la región pero sin poder dominar el espacio de forma efectiva. Para China es aún mayor el problema si se considera que Japón controla todos sus accesos a mar abierto. Por eso Rusia se encuentra en una mejor posición que China y como este último país tiene importantes intereses está en posición para mediar en una negociación, pero aun en mala posición para poder hacer una mayor presión militar en el continente. De ahí que ellos hayan visto con buenos ojos las acciones erosivas del foro de São Paulo frente a Occidente y se apresten a apoyar a los regímenes en Venezuela, Cuba y Nicaragua como una manera de fijar recursos estadounidenses y/o de Occidente en relación con otros escenarios de confrontación global como el mar de China, el Kurdistán, Ucrania, el Golfo de Adén y Corea del Norte.  
3.               Usted conceptualiza el espacio marítimo como vía de comunicación y fuente de recursos. Debido a las tensiones existentes entre posiciones políticas basadas en los conceptos de mare liberum y mare clausum entendido éste bajo la lógica de la Convención sobre Derecho del Mar (CNUDM). ¿Por qué Venezuela no forma parte de dicha convención?
La relación del concepto de espacio marítimo como vía de comunicación y fuente de recursos con los de mare liberum y clausum es histórica. Se remontan a las tesis de Francisco de Vitoria, A. Gentili, Francisco Suárez, T. Selden y Hugo Grocio y se sintetizan en el principio de libertad de los mares que se consagró en Westfalia. Con las Convenciones sobre Derecho del Mar de los años cincuenta del siglo pasado y finalmente con la Convención de las Naciones Unidas sobre Derecho del Mar o como le digo Carta de Jamaica en 1983 se trató de generar un marco jurídico en un espacio que la mayoría de los países consideraron que había sido la principal causa de conflictos desde el siglo XV. Con la Carta de Jamaica se logró establecer un límite para que los Estados ribereños pudiesen satisfacer sus necesidades existenciales en los espacios marítimos. Este límite fue la Plataforma Continental que le permite a los Estados tener exclusividad en la explotación de recursos hasta las 200 y/o 300 millas náuticas desde la costa y la Zona Económica Exclusiva hasta las 200 millas náuticas. Después de esos límites, para efectos de la explotación de recursos, el Alta Mar y los Fondos Oceánicos se rigen por otro conjunto de convenios que tratan de limitar la explotación en función de la existencia de fines conservacionistas y/o de desarrollo de los Estados y de la humanidad en su conjunto. Dentro de ese marco, luego de la aprobación de la Convención los problemas que se han presentado son de conceptualización y de la forma de delimitación.
Venezuela no forma parte de la convención, en ese entonces, debido a que no estuvo de acuerdo con el concepto de isla que allí se estableció porque nos perjudicaba en relación con el archipiélago de Los Monjes y con isla Aves, aunque hoy en día no es así, es decir, según la Convención para ser una isla debe poseer una vida económica auto-sostenible. En la actualidad ambos territorios insulares venezolanos poseen una vida económica autosostenible. Los otros aspectos que impidieron que Venezuela formara parte fueron: por una parte, que nuestro país no acepta la jurisdicción de terceros como la Corte Internacional de Justicia o el Tribunal del Mar para dirimir controversias de orden territorial. Hay que imaginarse el problema que tenemos en la actualidad con el territorio Esequibo y la proyección marítima que de él se produce a pesar de la ventaja que representa el Acuerdo de Ginebra. Por la otra, que Venezuela no acepta la forma de delimitación basada en la equidistancia porque nos podría perjudicar en el proceso de delimitación de áreas marinas y submarinas en el Golfo de Venezuela frente a Colombia y en la fachada del Atlántico meridional frente a Guyana. Esto no quiere decir que con Colombia la controversia de límites sea esencialmente conflictiva, lo que quiero decir es que en principio hay otros intereses en juego más importante como el de definir qué es lo público y lo privado en un sentido amplio en este cambio de circunstancias… De igual forma, no hay necesidad de escalar en un conflicto frente a Guyana, creo que lo que ha predominado históricamente en Venezuela ha sido la falta de voluntad política.
También hay otros aspectos que se pueden incluir en relación con la posición venezolana frente a la Convención como el fundamento de la delimitación. Para nuestro país prevalecen las circunstancias especiales y para la mayoría de los juristas de la Corte Internacional de Justicia como del Tribunal del Mar, son las circunstancias pertinentes.
Así pues, tenemos tres problemas de delimitaciones pendientes si incluimos a las islas anglosajonas del Caribe oriental, que dentro de un entramado estratégico de intereses globales pueden ser detonantes de una crisis internacional.
4.               ¿Cómo limita la Convención de las Naciones Unidas para el Derecho del Mar (CNUDM) la explotación petrolera?
La Convención del Derecho del Mar no limita la explotación petrolera per se, limitaba la explotación de recursos vivos y no vivos en los fondos oceánicos, especialmente lo que se conoce como nódulos polimetálicos por un tema de que las ganancias irían a un fondo de desarrollo. Pero a finales del siglo pasado esa norma se relajó y en la actualidad la limitación es tecnológica y más allá de ello es lo costoso de la explotación. Por supuesto, no hay limitación para la explotación de los recursos vivos y no vivos en la Plataforma Continental por parte de los Estados ribereños a no ser que se consideren aspectos ambientales…
5.               Asume usted que para Venezuela, la conexión de petróleo, líneas de comunicación marítima, delimitaciones marítimas, bajo poder marítimo e inestabilidad política son aspectos que deben ser considerados no sólo por la semejanza de las situaciones y la experiencia de haber vivido situaciones parecidas como el bloqueo del año 1902-03, también por los actores políticos que tienen intereses en ese espacio. Explíquenos cuales y sus motivos.
Desde la declaración del Mar de Venezuela en el año 1998, la política exterior venezolana en temas marítimos se mantuvo en el plano retórico. La realidad fue que se produjo un retroceso de un alcance tal que en la práctica se convirtió al país en un país mediterráneo. Para que exista poder marítimo tiene que haber industrias y una vocación para usar el mar para hacer una sociedad más prospera. El desarrollo del poder marítimo venezolano se mantuvo de manera más o menos constante desde la década de los años cincuenta del siglo pasado hasta el fin del siglo. La paradoja venezolana desde el punto de vista histórico es que siendo un importante país exportador de petróleo y este petróleo sale del país por vía marítima no se articuló las necesidades de defensa nacional con el único medio que garantizaba seguridad, bienestar y estabilidad al país. La alta dependencia del mar históricamente no se vio como una amenaza a pesar de la alta dependencia del país de las comunicaciones marítimas.
Cuando la clase dirigente decidió cambiar el modelo de desarrollo convirtiendo a Venezuela en un país mediterráneo la contradicción se radicalizó y eso convirtió al país en un foco de desestabilización regional que se evidencia no tanto en la destrucción del aparato productivo, la destrucción de las instituciones o el abandono del uso de los espacios marítimos para los fines del Estado, sino por dos causas: en primer lugar, en el advenimiento de una figura que no puede llamarse inmigrante ni desplazado sino la de un conjunto de individuos que escapan del país por haber perdido sus derechos fundamentales, como alertó en su oportunidad Hannah Arendt, generando una carga social que está siendo aprovechada por movimientos anti-Estados como el foro de São Paulo y que he denominado máquina de guerra siguiendo los postulados de Gilles Deleuze y Felix Guattari. Estos individuos que han perdido sus derechos y han abandonado el país junto con otros que se encuentran en iguales circunstancias y resistiendo aun dentro, son las consecuencias de un estado de excepción permanente establecido para producir una especie de río revuelto que permite el reacomodo que se está produciendo a escala global. En segundo lugar, se ha usado el capital producido por los ingresos petroleros y la infraestructura que la produjo en una fuente de desestabilización internacional de inimaginable alcance solo visualizado por las penurias que vivimos los venezolanos todos los días.
Esta situación no se puede comparar desde la perspectiva causal con la venezolana de 1902, aunque el régimen está intentando hacerlo por diferentes vías. Se parece más bien a los prolegómenos de la crisis de los misiles en Cuba en el año 1962 con la diferencia que el arma que se está usando es social y financiera con una alta capacidad de proyección transfronteriza. Creo que vamos a vivir una importante crisis internacional de alcance global y la gira del secretario de Estado estadounidense en algunos países de Iberoamérica así como la instrumentación de medidas para mejorar la interdicción marítima en el mar Caribe y Atlántico meridional parecen ser una preparación para ello.
¿Quiénes son los actores? Por una parte está Occidente que dentro del reacomodamiento global busca mantener espacios. Allí se encuentran EE.UU., los países de Europa Occidental con que Venezuela ha tenido importantes vínculos (UK, España, Francia, Alemania, Italia, Países Bajos, Portugal, entre otros) e Iberoamérica, es decir, los países que mayormente han sido afectados por el Foro de São Paulo. Por la otra, el Foro de São Paulo teniendo presente que su capacidad coercitiva en la actualidad se reduce la Venezuela, Cuba, la FARC (en su doble vertiente partidista y disidente) y Rusia y China. Como estos dos últimos países solo pueden mantener una presencia limitada su papel va a ser la de apoyo y la de negociación armada siempre y cuando no se escale en un conflicto generalizado de alcance global debido a la existencia de otros focos de conflictos que como ya indiqué se encuentran en Kurdistán, Golfo de Adén, Ucrania, mar de China y Corea del Norte.
6.               En el año 1914, exponen sus trabajos, el gobierno venezolano contaba con capacidad de maniobra para actuar en el escenario marítimo como se evidenció previamente en el combate naval de Río Hacha en 1901, la toma de Ciudad Bolívar en el año 1903, la captura de un mercante neerlandés sospechoso de apoyar a insurrectos en el año 1908, la diplomacia naval desplegada en Santa Marta en el año 1911 y las maniobras navales realizadas con el estallido de la Primera Guerra Mundial para mantener la integridad territorial venezolana. ¿Cómo fue esto posible? ¿Y qué acontece ahora en esa área de defensa?
Bueno, aquí hay que hacer precisiones. La principal vía de comunicación venezolana a principios del siglo XX era la marítima puesto que incluso penetraba a las tierras interiores gracias a la red fluvial del rio Orinoco, por lo que, en una situación convulsa de guerra civil, el espacio marítimo-fluvial fue el medio para trasladar tropas para contener los alzamientos… esa fue la capacidad de proyección con que contó el país en ese período. Ciertamente hubo una capacidad de proyección transfronteriza pero en una escala muy reducida y en un contexto coyuntural.
Después del año 1903 hubo interés por desarrollar el poder marítimo venezolano. Delgado Chalbaud y Ramón Díaz son ejemplos de ese esfuerzo. Pero Juan Vicente Gómez después del año 1913 acabó con ello y lo que hubo después fue retórica política. La preocupación por desarrollar un poder marítimo se retomó en la década de los treinta del siglo pasado cuando se presentaron problemas con EE.UU y se vio la efectividad colombiana en la guerra con Perú. Pero el estallido de la Segunda Guerra Mundial frenó ese esfuerzo. Desde los años cincuenta hasta el fin de siglo hubo un desarrollo más o menos constante del poder marítimo como indique. Este desarrollo se frenó a pesar del anuncio de grandes proyectos como el puerto de aguas profundas, islas artificiales, renovación de la flota petrolera, desarrollo de la marina mercante. Todo se redujo a la modernización de los puertos existentes y ello todavía no se ha concretado de modo completo a pesar del importante cambio de circunstancias representado por la ampliación del canal de Panamá. Infraestructura de mantenimiento y/o de servicios no se desarrolló y como ya indiqué la capacidad productiva nacional se ha disminuido de manera desastrosa, constituyendo este aspecto en clave para el desarrollo de la capacidad de proyección marítima.
La capacidad militar naval fue minimizada y se desarrolló medianamente la capacidad de guardacostas. Sin embargo, como no se cuenta con capacidad ni infraestructura de mantenimiento, la disponibilidad operacional es baja y de manera increíble se ha preferido recurrir a astilleros neerlandeses ubicados en Cuba que la capacidad nacional. Esto ha agravado las cosas en el mundo marítimo y por ello es que he dicho que nos hemos convertido en un país mediterráneo. Desde esta perspectiva, la capacidad de defensa naval venezolana se ha reducido a nivel de la Segunda Guerra Mundial y en esa época el nivel era muy bajo.
7.               Usted señaló que Rusia a partir del desarrollo de una capacidad de negociación en el ámbito marítimo está en condiciones de pescar en río revuelto en caso de una crisis internacional siempre y cuando esta crisis no se torne en una guerra desde el punto de vista fáctico. En este caso el apoyo que pudiera recibir el régimen actual en Venezuela es sumamente limitado a mediano plazo con tendencia a disminuir, aun vengan los rusos a pescar en río revuelto. ¿No intervendrían en caso de un agravamiento de la crisis en Venezuela?
La clase dirigente rusa conoce sus limitaciones, pero ellos históricamente han sabido armonizar capacidades y limitaciones y sus intereses. En Kosovo lograron meter tropas terrestres a pesar del bloqueo que la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) tenía sobre Serbia. Ellos han sido muy hábiles. Aquí en América cuentan con Cuba con sus limitaciones logísticas, pero los rusos cuentan con una capacidad de proyección aérea de alcance global. Nosotros hemos recibido aeronaves rusas de largo alcance que pudieran prestar un apoyo limitado. Incluso Cuba pudiera también actuar de la misma manera en el país con el apoyo ruso como ocurrió en Angola, Etiopia y Somalia, pero este país está también en medio de un proceso de transición generacional en medio de severas limitaciones económicas que le han reducido su capacidad de maniobra.
Hasta ahora, rusos y chinos han pescado en rio revuelto con el apoyo cubano. Si hay una escalada violenta sólo podrán hacerlo, con la capacidad disponible, hasta un nivel que no desemboque en una guerra regional.
8.               Es Venezuela un potencial problema para el hemisferio occidental ¿Por qué?
Fíjate que ya lo he estado indicando. La crisis interna en Venezuela está comenzando a ser un problema regional en términos humanitarios. Desde esa perspectiva, no se puede aplicar una política de contención para encapsular “un problema interno”  de un Estado. Por otro lado, el uso del capital financiero del Estado venezolano para apoyar acciones políticas y/o criminales de forma transfronteriza y a escala global es un problema que la legislación internacional no había contemplado. A esto se agrega el apoyo que ha brindado el régimen en Venezuela de forma tácita y explicita a movimientos anti-orden a escala global, especialmente en el cercano oriente. Esto merece una aclaratoria. Si un movimiento político como el foro de São Paulo lucha contra el orden, cualquier medio es lícito para ello. De ahí que el desconocimiento de la norma u operar más allá de una norma para lograr un efecto político es un medio para esa organización. Eso explica el narcotráfico y otras actividades ilícitas como la legitimación de capitales. Este último medio ha sido usado para la ejecución de acciones políticas y para alterar relaciones sociales.
Así pues, usar cualquier medio de forma intencional para destruir el orden estatal, regional e internacional más allá de los conocidos en época de conflicto es una novedad. La forma de acción ha consistido en usar el capital para corromper estructuras políticas e implantar posteriormente dispositivos de control social de talante totalitario para garantizar la permanencia en el poder. Esto nos coloca en el plano ideológico por las implicaciones que en sí tiene un régimen totalitario.
Desde el punto de vista ideológico pareciera existir en la región, por una parte, un antagonismo entre totalitarismo y democracia liberal y, por la otra, una crisis entre los valores que sustenta la democracia liberal y la puesta en práctica de esos valores desde el punto de vista político. Pero en la región en la practica la democracia liberal ha sido una ficción que solo comenzó a ser comprendida en su justa dimensión cuando la política del régimen venezolano actuó en consonancia con el gobierno de Ignacio (lula) da Silva en Brasil y el régimen cubano, dentro del marco del foro de São Paulo, para destruir la estructura institucional de los países de la región aprovechando los niveles de ilegitimidad de la clase dirigente en cada una de esas comunidades políticas. El mecanismo que adoptaron países como Argentina, Perú, Paraguay, Chile y más recientemente Ecuador ha sido el de implantar una democracia tendencialmente liberal y republicana para contrarrestar las corrientes totalitarias. Pero Colombia se debate entre el totalitarismo y la libertad y los abanderados del foro de São Paulo en ese país, es decir, la FARC está actuando para implantar el totalitarismo. En ese marco es que se circunscribe Venezuela. La FARC es el principal aliado del régimen venezolano y este último está haciendo y hará lo posible para lograr afianzar la posición política de esa organización como un mecanismo de supervivencia. México está igualmente amenazado, al igual que Brasil, pero la clase media en esos países es muy fuerte y ello los ayudará a conjurar la amenaza teniendo presente el espejo venezolano.
Con respecto a la crisis de valores, la democracia liberal se sustenta en los derechos humanos. La presión totalitaria que ha recibido la sociedad venezolana la ha diezmado pero no la ha derrotado. Sin embargo, una comunidad internacional fundamentada en la democracia liberal republicana no puede subsistir si no hace nada por evitar que uno de sus miembros asuma una estructura de antivalores llevando a un país a una crisis como la que vive Venezuela, porque esa actitud en cierta forma expresa la reproducción de forma simultanea dentro de su mismo orden político de esa práctica degenerada de manera inconsciente. Moralmente ostentar valores con pretensión de universalidad y no practicarlos es lo que hace de Venezuela una amenaza regional por el potencial de corrupción de las estructuras institucionales de otras comunidades políticas. Así pues la corrupción provocada de manera intencional de la estructura de valores, la exportación de la crisis social y la legitimación de capitales de dudosa proveniencia son los elementos de una máquina de guerra que está desestabilizando la región.
Algunos dirán que la acción del foro de Sao Paulo enmarcada en lo que se conoce como socialismo del siglo XXI está en retirada en la región quedando los focos cubano, venezolano y de la FARC, pero si se tiene presente que Cuba incubó la subversión en los años sesenta del siglo pasado y esta floreció a inicios del siglo XXI, el morbo pestilente de la corrupción de las estructuras políticas puesto en práctica por el socialismo del siglo XXI de la tiranía venezolana es otro ingrediente que junto con la acción realizada por Cuba solo necesita, como lo ha hecho Cuba hasta el presente, sostenerse para recoger sus frutos en un futuro muy cercano por la debilidad de las instituciones iberoamericanas.
Así pues, el solo hecho que persista la tiranía en Venezuela por la máquina de guerra que ha activado es un problema regional desde hace varios años por su potencial de proyección regional amparado por los recursos que todavía da el petróleo. El lado bueno fue que la comunidad internacional se ha dado cuenta de ello por la rebelión del año 2017.
9.    ¿Y es posible que suceda una intervención?
Venezuela no es Panamá, ni Irak. Imagínate, para liberar Kuwait se necesitó una preparación de siete meses y el despliegue de un poco más de medio millón de hombres. La Revolución de los Asuntos Militares (RAM) redujo la cantidad de hombres y ello permitió a EE.UU. destruir el régimen de Saddan Hussein, pero produjo una guerra civil que aún persiste. Ese es el problema de una intervención. No la veo factible. Veo una mayor presión internacional, pero este debe también ser dirigida a Cuba de forma simultánea para que sea efectiva.
De ahí que las instituciones venezolanas deben actuar para restituir el orden desde el punto de vista formal y sólo así una ayuda internacional de cualquier naturaleza sería viable. De igual forma, la sociedad se debe reorganizar para ejecutar acciones restitutivas de más efectividad.
10.            ¿En qué peligra Colombia?
Colombia peligra en la medida en que la FARC se consolide como fuerza política porque, como dije, es junto con Cuba la principal aliada de la tiranía en Venezuela en la región. Estos son los últimos bastiones que le quedan al foro de São Paulo. Colombia está bajo peligro porque se corrompieron las instituciones desde el mismo momento que se implantó el acuerdo de paz a pesar de la negativa mayoritaria de los colombianos. La corrupción política se presente cuando se altera un orden a pesar del desacuerdo de la mayoría. En Colombia además de imponer un acuerdo de paz, la imposición, en sí, ha representado impunidad y mantenimiento de la realización de acciones subversivas. Para el actual presidente de Colombia la amenaza que pesa sobre él es que con el deterioro de la situación político-social en Venezuela corre el riesgo que se desmorone su acción política con consecuencias inimaginables para ese país.
11.            ¿Quiénes influyen más en los países del ALBA? ¿Rusia o China?
A pesar de la retórica política, creo que el ALBA fue un proyecto cubano financiado con dinero venezolano y en ese proyecto ni Rusia ni China podían obtener más ventajas que las que habían logrado de forma bilateral con cada uno de los países miembros. Como proyecto cubano fue la concepción de la organización de un mercado económicamente compensado donde obtendrían ellos el mayor beneficio.
12.            ¿Qué papel juega de Corea del norte en el ámbito internacional? y específicamente ¿qué busca tan activamente en Venezuela?
Así como la crisis actual del cercano oriente fue una resultante de la Primera Guerra Mundial, las dos Coreas son de la Segunda. Son problemas irresueltos y capaces de provocar una crisis de todo el orden internacional. La Venezuela socialista y totalitaria por alguna u otra razón concebida dentro del foro São Paulo ha asumido esos dos problemas como propios insertándose en la estructura del conflicto a escala global. Venezuela inserta en esa estructura del conflicto, según la doctrina de seguridad estadounidense, le permite a Corea del Norte, a China, a Rusia, al Kurdistán e incluso Cuba maniobrar para obtener fines políticos. Es decir, cuando se recalienta una zona de conflictos, el resto de los autores perturbadores aprovechan la ventana para actuar en función de la obtención de sus intereses.  Ese es foco del interés norcoreano. Fíjense un detalle. Los ucranianos están muy interesados por lo que ocurre en Venezuela. ¿Por qué? EE.UU los está apoyando en su organización de defensa. Rusia lo hace con Venezuela. Si escala la crisis en Venezuela ¿los ucranianos estarán tranquilos? ¿Si es al contrario ocurrirá igual? Todo depende de la puesta en juego. El caso es que Venezuela entró en un carrusel siniestro violando el principio de neutralidad que caracterizó su política exterior en gran parte del siglo XX. En el caso coreano hay que recordar lo siguiente: una guerra puede estallar allí en cualquier momento, por ello necesita aligerar presiones para poder aumentar sus capacidades y la tiranía venezolana los ayuda, por eso ha sido bienvenida a ese club de perturbadores.

viernes, 2 de marzo de 2018

LA CONCEPCIÓN DEL TIEMPO EN LA CRISIS VENEZOLANA



La negociación en tanto que apaga fuegos de la rebelión venezolana ha sido una operación que ha demostrado la forma en que la tiranía controla el tiempo político en la crisis venezolana, es decir, a partir de una relación de co-pertenencia del Ser con el tiempo debido al entrecruzamiento entre su condición y los hechos que lo impulsan a actuar de una manera determinada desde una perspectiva política[1]. Este hecho nos indica que el tiempo en sí mismo ha sido su principal arma y el modo en que lo han usado ha sido mediante la aceleración y desaceleración del proceso de implantación de su proyecto político de carácter totalitario. Sobre la naturaleza del plan más allá de las indicaciones hechas en reflexiones previas hay exhaustivos trabajos realizados por una pléyade de venezolanos que han seguido desde hace mucho tiempo el derrotero de la tiranía por implantar en nuestro país un proyecto político trasnacional que todavía ha sido vistos, al menos, con incredulidad por los restos de la clase política que tuvo el poder hasta el año 1998 y sus herederos.
Ejemplos de desaceleración y aceleración podemos observarlos en la fase de la crisis venezolana que va de enero de 2016 a febrero de 2018. En primer lugar, la tiranía produjo una desaceleración del tiempo de implantación de su proyecto político como consecuencia de la resistencia que se manifestó a la citada intención. El modo fue el diálogo, la negociación... Una vez que la tiranía logró su objetivo intento acelerar el tiempo de aplicación y ello produjo la rebelión a finales de marzo de 2017. El esfuerzo por mantener la velocidad significó, por una parte, muerte y sufrimientos a la sociedad venezolana y, por la otra, la atención internacional y sanciones personales a miembros de la clase dirigente en el poder. Con la escalada de sanciones, los tiranos que tienen capturada a la sociedad venezolana se vieron forzados a desacelerar y ello se materializó en otro proceso de negociación. En la actualidad, su intento de acelerar nuevamente el proceso con el llamado a una parodia de votación se ha encontrado con una fuerte resistencia internacional y ello los ha obligado a negociar retrasando un mes más el acto que pretende lavar la cara del régimen totalitario. La pregunta que surge aquí es si esta negociación entre bastidores es o no una desaceleración. Mi respuesta es no. La tiranía y los restos de la clase política que mantuvo el poder hasta el año 1998 y sus herederos (rcpp98h), están buscando sobrevivir a toda costa. En este contexto, un retraso de dos meses no es una desaceleración, es eliminar el obstáculo para implantar a rajatabla el proyecto político del foro de São Paulo en momentos en que sobre todo Colombia (también México y Brasil) se apresta a un proceso electoral con la amenaza de que el poder del foro saopaulista se expanda nuevamente. En total, la negociación le ha dado a la tiranía desde marzo de 2014 cuatro años para implantar su plan y a cambio el rcpp98h ha logrado entre otras cosas que uno pudiera imaginarse aliento político.
Como la acción de la tiranía ha tenido como medio para alcanzar su objetivo el tiempo, hay dos aspectos que deben ser tenidos en consideración, en primer lugar, la tiranía necesita asegurarse en el poder para que el foro de São Paulo tenga un punto de apoyo frente a Colombia y los próximos escenarios futuros regionales y globales y rcpp98h durar como alternativa light de la Internacional Socialista en caso de que caiga la tiranía y, en segundo lugar, ambas agrupaciones han objetivado hasta tal punto al venezolano que, por una parte, lo ha hecho superfluo y, por la otra, un medio para alcanzar fines políticos. Estos dos aspectos me llevan a examinar cuatro aspectos para comprender el momento político que estamos viviendo para esbozar una ontología política que genere las condiciones de posibilidad para la acción política y superar así la situación opresiva de estas dos fuerzas antagónicas que han llevado a la sociedad venezolana al más completo empobrecimiento y la está conduciendo a la soledad y la muerte. Estos aspectos son: la constitución del tiempo político según Negri para comprender la idea de tiempo que opera la tiranía, la constitución del tiempo del proyecto de dominación saopaulista en Venezuela, el acomodamiento de los restos de la clase política que condujo al país entre 1958 y 1998 y sus seguidores y, finalmente, la constitución de un tejido político de la sociedad venezolana como camino para la construcción de una república.
La constitución del tiempo político según Negri.
Antonio Negri en su obra 'La Costituzione del Tempo. Prolegomeni...[2], ha desarrollado una secuencia de cómo opera el tiempo para provocar un cambio político. Esta secuencia nos va a ayudar a comprender el logos del proyecto saopaulista y consecuentemente, la intencionalidad de la tiranía en Venezuela. De forma esquemática la secuencia se presenta como sigue:
Concepción del tiempo
Explicación
Primer desplazamiento: Tiempo del ser subsumido
Como el tiempo es, respecto del trabajo, medida y materia, forma y sustancia, es idéntico a su valor. Aquí puede entenderse la subsunción del ser dentro de un flujo temporal visto como medida y el trabajo como cualidad de ese flujo. Por lo que el tiempo puede verse como sustancia del proceso y consecuentemente como un tejido fenomenológico que permite observarlo también no sólo como medida sino como existencia en sentido heideggeriano (Dasein). A partir de aquí, el flujo temporal puede ser visto como sustancia colectiva (tiempo colectivo) conformada por una mutiplicidad de sujetos, potencialmente antagonista, en un mismo ambiente (Umwelt).
Tiempo Colectivo
A
En la subsunción real el colectivo es visto por el Estado como una estructura carente de tiempo visto como existencia y si sujeta por un tiempo-medida que persigue mantener un equilibrio a partir de una analítica del poder entendido como dominación donde la mente es vista como un espacio a ser llenado y su contenido como la geografía que debe expresar el espacio.
B
La subsunción real actúa como producción social que genera situaciones de crisis por la emergencia de tiempos irreversibles que provoca desplazamientos de la subsunción gracias a existencias basadas en tiempos vividos que en sí mismo fomentan el antagonismo.
Tiempo productivo

A
Para mantener el equilibrio y evitar el desplazamiento  el Estado disciplina ordenando de forma centralizada la producción estableciendo una organización social de la misma y estructurado en comando productivo social.
B
Se presenta como un tiempo de autovalorización a partir de lo vivido (existencia) y de gestación de la cooperación que se expresa a su vez en un tiempo de lucha, cualidad más del trabajo, constitución de la identidad real gracias a ese momento de ruptura (acontecimiento) como consecuencia del desplazamiento. Aquí la autovalorización es productividad (producción de sí) y es el modo en que se expresa la liberación. El tiempo pasa a ser entonces esencia colectiva y productiva
Tiempo constitutivo

A
La figura del tiempo productivo y del tiempo colectivo concluye en el tiempo del Estado cuando extiende y da intensidad al orden social mediante movimientos de aceleración y desaceleración de los dispositivos de ordenación apoyados por un aparato policial, una estructura administrativa y un aparato judicial que es la forma en que se ordena el espacio. Su objetivo es evitar que los sujetos puedan producir de manera autónoma y generar desplazamientos y por consiguiente desequilibrios. De ahí es que el contexto de acción del Estado es de estado de excepción. Así pues el Estado es el mundo de la angustia activamente vivido, en sentido heideggeriano[3], siendo su actividad básica la negación del sujeto autónomo
B
Al ser el tiempo del Estado una actividad de negación el tiempo entendido como vivencia pasa a ser de lucha, es decir, constitutivo. En este contexto la autovalorización es tiempo constitutivo.
Tiempo de revolución

W
El tiempo ideal del Estado es espacio equilibrado que se expresa en un tiempo-medida en un espacio mental que  en sí indica la destrucción del Ser al ser visto sólo como un medio dentro de una estructura.
Y
El tiempo de la vida, o sea la practica ontológica del tiempo vivido se expresa como cualidad productiva que, para Negri, debe buscar la extinción del Estado.

 Es de señalar que el tiempo es para Negri lo concreto de la vida en cuanto sustancia del ser colectivo, productivo y constitutivo de lo nuevo. Es decir es un horizonte y una medida cualitativa de una alternativa y del cambio. En este contexto considera la imaginación como la más concreta de las potencias temporales debido a que promueve lo nuevo.
El problema de Negri, como de toda la izquierda, es que al final de cuentas se debe inducir ideológicamente al sujeto provocando la ocurrencia de aquello que supuestamente pretenden erradicar desde una perspectiva que tendencialmente termina siendo totalitaria como ya hemos demostrado en otras reflexiones con la ayuda del pensamiento de Hannah Arendt[4]. Veamos ahora cómo se presenta este proceso totalitario en Venezuela a partir de esta concepción del tiempo.
La Constitución del tiempo del proyecto saopaulista en Venezuela.
En relación con la constitución del tiempo del proyecto de dominación saopaulista la tiranía, siguiendo la lógica de la construcción negriana, debió haber recorrido una secuencia programática para evitar el resultado soviético. Si se analiza ahora el manejo del tiempo por parte de la tiranía siguiendo esta secuencia negriana nos encontramos con lo siguiente:
Concepción del tiempo
Explicación
Tiempo del ser subsumido
El estado encarnado en la tiranía ha implantado una serie de dispositivos para capturar el tiempo de cada uno de los venezolanos a partir de una concepción basada en el tiempo-medida.
Tiempo Colectivo A
Justo con esta operación ha buscado vaciar la conciencia del venezolano al tratar de borrar el tiempo vivido. Para ello ha estado controlando el ambiente de vida limitando las funciones vitales y los servicios básicos que facilitaban la co-existencia. El objeto de la tiranía es asegurar un punto de equilibrio que le garantice su permanencia en el poder.
Tiempo productivo A
Al centralizar todas las actividades productivas y que condicionan el ambiente de vida, la tiranía ha ejercido una actividad disciplinar reorganizando la sociedad.
Tiempo constitutivo A
La tiranía extiende y da intensidad a su tiempo mediante la aceleración y/o desaceleración del orden social mediante el ordenamiento del espacio usando al efecto herramientas policiales y administrativas. Su propósito es evitar que acaezca un nacimiento, en el sentido arendtiano, que se exprese como tiempo productivo autónomo y genere algo nuevo[5].
Tiempo de la revolución ‘W’ y ‘Y’
Como el tiempo ideal de la tiranía ha estado basado en la condición de posibilidad de implantar un proceso sistemático de destrucción de la venezolanidad entendida como tiempo vivido desde su gestación a mediados del siglo XVIII, han creído que se encuentran en el momento para implantar el proyecto saopaulista en función del contexto histórico que han considerado se encuentran. El medio para ello es extinguir la idea de Estado como ha sido vivida pero se han encontrado con una fuerte resistencia.

Como se ha podido observar hemos utilizado a (A) debido a que explica como la tiranía busca destruir el Estado, es decir, el orden político histórico venezolano, para implantar otro Estado basado en un proyecto político trasnacional. El intento de aceleración del proceso de implantar ese nuevo proyecto político se debe, en primer lugar, a la intensidad de los tiempos (B) entendido como el tiempo de los venezolanos que resisten cada vez con un creciente apoyo internacional, en segundo lugar, a la fricción producida por su situación interna que ha fracturado su estructura disciplinar y lo ha obligado a escalar en el empleo de la fuerza y, en último lugar, la creciente conciencia internacional de que la situación venezolana es una amenaza a la paz y seguridad regional por ser consecuencia de la evolución de un movimiento anti-westfaliano.
Nos hemos valido de pensamiento de Negri para que se pueda observar desde la lógica marxista la idea del tiempo que no es visible para la rcpp98h. La pregunta que surge es por qué persiste este proyecto en Venezuela a pesar del rechazo de la mayoría de los venezolanos. Eso lo veremos a continuación.
El tiempo constitutivo de los restos de la clase política que se mantuvo en el poder hasta el año 1998 y sus herederos (rcpp98h).
Los restos de la clase política que se mantuvo en el poder hasta 1998 y sus herederos siguen aplicando recetas pasadas a fenómenos presentes y eso, en primer lugar, produjo su caída en el pasado y, en segundo lugar ha arrastrado a la población venezolana a la penosa situación que hoy viven. Su propósito es evitar que se produzca un cambio político que afecte sus intereses históricos. Por ello se opone a la concepción del tiempo (B), aunque lo usaron como mecanismo de negociación para garantizar su supervivencia política. En este sentido, su concepción del tiempo está basada en su asunción desde la misma perspectiva de la tiranía. Ello explica la colaboración. Al operar de acuerdo con la misma estructura del tiempo su propósito no es la destrucción del Estado sino la de ‘mejorar’ las condiciones de la población en las mismas circunstancias. Se pudiera decir que su orientación es reformista dentro de esa línea ideológica. Esta concepción del tiempo es lo que ha criticado Hannah Arendt en el sentido que al comprender la política desde la relación medios-fines le ha quitado la idea de lo nuevo que tiene una actividad deliberativa desde la perspectiva política. En consecuencia, este tipo de relación determinó el agotamiento del modelo político que fue suplantado en el año 1998 debido a que todo producto teórico está sujeto a un tiempo medida que tiene un fin. No es un problema exclusivo venezolano. La crisis del sistema de representación política a escala global y en especial en Occidente ha sido la fisura que ha usado el proyecto saopaulista para imponer un nuevo orden político de talante totalitario.
Estos signos de agotamiento que han generado la crisis debieron haber servido para una renovación en el pasado y a lo largo de estas décadas, pero una visión del mundo basada en la relación medios fines tiene un tiempo-medida finito y ese fin les llegó aunque se resistan a reconocer ello. ¿Por qué seguir arrastrando a los venezolanos? ¿Es tan difícil volver a empezar si ese es el impulso que motiva su existencia? Eso no es involución, es estancamiento. Un estancamiento frente a los movimientos de la historia puede ser visto como una alteración, corrupción desde la perspectiva aristotélica, degeneración, incapacidad de seguir al mismo ritmo de la historia y el progreso el flujo de la vida. La visión del mundo que les permitió regir el destino del país se la llevó el viento... no en el 1998 sino cuando hubo una alteración en el país mucho antes de esa fecha que no fue corregida a tiempo. En este contexto, los participantes a la votación de mayo están produciendo una especie de ritornelo dentro de otra ópera bufa cuyo objeto ya no oculto es la preservación de privilegios históricos y/o de reciente data. Esta realidad nos lleva al tiempo de los venezolanos.
La constitución del tejido político de la sociedad venezolana como camino para la construcción de una república.
El tiempo de los venezolanos que resistimos a esta situación opresiva es el tiempo (B). El hecho que muchos hayan tenido que dejar el país de una forma temporal o no, no constituye una perdida, es un activo para el futuro. La flor y nata de muchas sociedades europeas quedaron sepultadas en los cementerios de la primera y segunda guerra mundial y Europa aún existe. A pesar de su vejez no ha desaparecido. A diferencia, los venezolanos que salen se resguardan para el futuro. Ya tienen una vivencia inculcada por herencia familiar. Así los venezolanos tenemos mucho por delante, la dignidad de seguir luchando aquí en el país y la dignidad de los que van a luchar en otras latitudes para apoyar en el futuro cercano o lejano a los que se seguirán batiendo por principios universales forjados en el curso de la historia y no por atajos gestados por el resentimiento y la maldad. Esto está conformando un tejido político: ¿Cómo se ha conformado este tejido? Sigamos con la estructura de esta reflexión:
 Concepción del tiempo
Explicación
Tiempo del ser subsumido
La clase media venezolana, la más afectada por la situación político-económica, ha estado luchando por generar una capacidad productiva no capturada por la tiranía. Ello en sí es un desplazamiento y consecuentemente el fin de la subsunción.
Tiempo Colectivo B
El desarrollo de la capacidad productiva está gestando una forma de producción social que está generando situaciones de crisis por la emergencia de tiempos irreversibles que están provocando más desplazamientos de la subsunción gracias a existencias basadas en tiempos vividos que en sí mismo fomentan un mayor antagonismo.
Tiempo productivo B
La resistencia no es autovalorización, es reafirmación de sí. Esta reafirmación se fundamenta en un tiempo vivido (existencia) que está fomentando la cooperación. La cooperación ha estado constituyendo una identidad real y se ha estado expresando en tiempo de lucha. Un ser que resiste es un ser libre que busca expandir y/o recuperar su espacio de libertad.
Tiempo constitutivo B
Resistir y cooperar pueden ser visto como tiempo constitutivo para la instauración de una república liberal basada en la existencia de venezolanos productores.
El tiempo de los venezolanos.

El tiempo de la vida, o sea, la práctica ontológica del tiempo vivido se expresará como cualidad productiva que buscará el establecimiento de un nuevo origen para constituir una república que sea capaz de adaptarse a los cambios sociales y con un norte: el progreso

Con este norte podemos afirmar que los venezolanos no estamos atemorizados o desmoralizados, realmente estamos cansados de que usen nuestro esfuerzo para beneficio de una camarilla que nos ve como medios y utiliza el tiempo de acuerdo con una relación medios-fines. Solo se está resistiendo y generando las condiciones de posibilidad de entrar de nuevo en la escena política como potencia arrolladora.
Un político que pretenda pensar en función del bien de la comunidad política debe pensar y actuar productivamente en términos de pasado y futuro, es decir, de un tiempo vivido como medio para preservar la cohesión de la comunidad política. En este contexto, un político debe ser un Ser-productor en sentido amplio y obrar con el ejemplo. El que sólo piense y actúe en función de un tiempo-medida lo hace por un propósito que tiende a circunscribirse en un interés personal y a promover y/o mantener la crisis política.



[1] HEIDEGGER, M. (1990). Identidad y Diferencia. Barcelona. (T. H. Cortés y A. Leyte). Editorial Anthropos. 191 p. Llama la atención el papel del pensamiento heideggeriano dentro de los seguidores del  pensamiento marxista. Mi propósito aquí es mostrar que han reproducido aquello que han cuestionado del pensador alemán.   
[2] NEGRI, A. (1997). La Costituzione del tempo. Prolegomini. Orologi del capitale e liberazione comunista. Roma. Manifesto libri. 180 p.
[3] Ver al respecto: HEIDEGGER, M. (1927/1967). Sein und Zeit. Tübingen. Max Niemeyer Verlag. 449 p. En español: (1927/98). El Ser y el Tiempo. (2ª ed.). (T. J. Gaos) Santa Fé de Bogotá. FCE. 478 p.
[4] Ver al respecto las reflexiones donde se compara el pensamiento negriano y arendtiano, es decir, “DOS LECTURAS ACERCA DEL ESTABLECIMIENTO DE UN NUEVO ORIGEN EN VENEZUELA: HANNAH ARENDT Y ANTONIO NEGRI” en http://edgareblancocarrero.blogspot.com/2017/09/dos-lecturas-acerca-del-establecimiento.html y “EL REPUBLICANISMO ARENDTIANO Y SUS CRÍTICOS POSTMODERNOS” en http://edgareblancocarrero.blogspot.com/2017/12/el-republicanismo-arendtiano-y-sus.html
[5] Ver al respecto una reflexión previa en “LA TIRANÍA EN VENEZUELA Y EL MAL RADICAL: ANÁLISIS POLÍTICO DESDE LA PERSPECTIVA DE HANNAH ARENDT” en http://edgareblancocarrero.blogspot.com/2017/07/la-tirania-en-venezuela-y-el-mal.html