jueves, 20 de febrero de 2020

IMPLICACIONES OPERACIONALES ACERCA DEL LANZAMIENTO DE UN MISIL OTOMAT POR PARTE DE LA ARMADA VENEZOLANA DENTRO DEL MARCO DE LA DIPLOMACIA NAVAL EN PROCESO EN EL ESCENARIO CARIBEÑO



Desde mediados del año 2018 con el inicio de una diplomacia naval enmarcada en realizar ayudas humanitarias al país hasta el presente se ha producido un lento pero sostenido proceso de aumento de la escalada de conflicto en el mar Caribe como un todo que involucra a Venezuela, Cuba y Nicaragua[1]. Sin embargo, en fecha reciente se produjo un cambio de circunstancias con el lanzamiento efectivo de un misil OTOMAT por parte de la Armada venezolana que en sí plantea una reevaluación del escenario de conflicto creciente en la región debido a que si bien dentro de un proceso de apreciación estratégica esa capacidad de lanzamiento es posible que haya sido considerada la demostración efectiva implica para las partes en conflicto potencial la reconsideración de todos los medios que pueden ser puesto en el tablero de juego[2].
Mis consideraciones en este sentido no apuntan a la valoración del lanzamiento efectivo del misil en sí desde una fragata venezolana luego de un importante proceso de realistamiento[3] dentro de la severa crisis económica que vive el país tal como apuntó La Stampa de Italia[4], sino más bien a la reconfiguración del teatro de operaciones dadas las nuevas circunstancias generadas por la posibilidad de empleo de ese medio[5]. Para ello haré mención de las potencialidades disuasivas convencionales de la armada venezolana en función de la efectividad del lanzamiento realizado, las implicaciones operacionales y, finalmente, sus implicaciones operacionales.
Las potencialidades disuasivas convencionales de la armada venezolana
Como se sabe, una parte del arsenal de misiles OTOMAT con que cuenta la armada venezolana fue enviado a Cuba para ser puestos a punto. Específicamente 18. De ese número, según Infodefensa, no se conoce del paradero de uno y, según esa fuente, los otros dos fueron “canibalizados”[6]. Creo que también pudiera pensarse como hipótesis que fueron destinados a la realización de otro tipo de actividades de estudio como su adecuación como sistema de defensa de costa.
Si consideramos como cierta la información de Infodefensa y la hipótesis realizada podemos concluir que la Armada de Venezuela dispone de catorce misiles superficie-superficie que pueden ser lanzado formalmente desde seis plataformas potenciales disponibles: tres fragatas clase “Mariscal Sucre” y tres patrulleros clase “Constitución”. Ahora habría que reflexionar acerca del tipo de disparo realizado. Si consideramos que los sensores de búsqueda de superficie están operativos podríamos pensar que se podría haber realizado el lanzamiento de un modo tal que el blanco (el tanquero) estaba siendo observado (ploteado) desde la plataforma lanzante, sin embargo, en términos prácticos el perfil electromagnético de los buques venezolanos, a  estas alturas, es ampliamente conocido por lo que podemos pensar también que el sistema que permite el lanzamiento de los misiles OTOMAT, es decir, el sistema “Teseo” es capaz de lanzar misiles en modo local, es decir, lo que se conoce como tiro ciego: una modalidad de lanzamiento basada en la introducción de datos de marcación y distancia del blanco de forma manual a partir de una información dada por otras fuentes ajenas a los sistemas de la plataforma. Esta es una visión optimista que parte de la asunción de que todos los sistemas de alerta temprana de los medios navales venezolanos potenciales están operativas.
Desde esta perspectiva, se puede pensar en un tipo de lanzamiento bajo la figura de silencio de radar con una alta probabilidad de impacto. Esto significa tres cosas: las seis plataformas navales venezolanas se convirtieron en blancos militares potenciales en cualquier apreciación de la situación, se establece un margen de seguridad de empeñamiento entre buques en el escenario de conflicto caribeño de hasta unas cincuenta millas náuticas si se considera que el perfil de vuelo del misil OTOMAT le otorga al mismo una importante cobertura a pesar de la existencia de sistemas de defensa de punto embarcado capaces de detener misiles a velocidades supersónicas y, en función de qué estaría aconteciendo con los otros tres misiles en Cuba dada la existencia de los que podrían aun estar almacenados, se podría pensar en su adecuación como sistemas de defensa de costa móviles desde el mismo momento que las plataformas navales en sí mismas están limitadas en términos tácticos y operacionales aunque puedan disponer de madrigueras que le permitan ser un enemigo apreciable. Junto a estos hipotéticos sistemas de defensa de costas también está la capacidad potencial con que cuenta la tiranía de operar sistemas de misiles anti-buques lanzados desde las aeronaves Sukhoi Su-30 como los misiles supersónico J-31, capaz de impactar a un buque enemigo situado a 80 millas náuticas de distancia[7]. Esto nos lleva a examinar las implicaciones operacionales del citado lanzamiento.
Las implicaciones operacionales
Si bien habría que hacer una evaluación del daño causado por el misil al tanquero, la imagen que nos viene a la mente es la de los tanqueros averiados en el golfo Pérsico en fecha reciente. Por las imágenes que han recorrido las redes sociales se puede inferir de manera superficial que el misil OTOMAT lanzado por una fragata venezolana entró, explotó y salió del blanco asignado. Como el blanco estaba vacío, los efectos del daño se redujeron considerablemente y a esto hay que agregar que los restos del misil con su carga dañina aparentemente cayeron al agua momentos después del impacto por lo que no pudieron producir más daño. Si hubiese estado el tanquero en uso, la imagen de los buques tanquero ardiendo en el golfo Pérsico nos puede dar una idea de su letalidad, es decir, del potencial daño que pueden causar. Dicho de otra manera, los buques tanqueros y mercantes son mucho más grandes que cuando fueron proyectados estos misiles requiriéndose considerar, en consecuencia, la posibilidad de uso de un mayor número de misiles para neutralizar una plataforma de esa naturaleza. En relación con los buques de guerra, la situación es diferente: la efectividad del misil OTOMAT frente a plataformas navales con sistemas de defensa antimisil de finales del siglo pasado e inicios del siglo XXI es considerable. Frente a plataformas navales construidas a inicios del siglo XXI va a depender de los sistemas con que cuenta, del nivel de alistamiento de los buques y de la naturaleza de la crisis donde pudieran verse empeñados[8]. Para una mejor comprensión hay que tener presente los siguientes casos:
·         Hundimiento del destructor “Eilat”[9] e inutilización de la fragata “Stark”[10]. Ambos casos acaecidos en momentos en que no había una guerra declarada o efectiva entre los países cuyos medios estaban empeñados.
·         Corbeta “Hanit” averiada a inicios de la guerra del Líbano del año 2006 por una batería de defensa de costa de Hezbollah. En este hecho estuvieron en juego sistemas de ataque y defensa de nueva generación[11].
·         Los ataques a tanqueros en el Golfo Pérsico vistos a la luz del lanzamiento del OTOMAT permiten hacer inferencias a cerca del tipo de medio empleado para hacer daño y la naturaleza del daño en el sentido, como dijimos, que a pesar de generar graves perturbaciones en sí mismas el impacto destructivo es bajo.
De los ejemplos mostrados, si se exceptúa el caso del destructor “Eilat” cuyo hecho acaeció después de la guerra de los Seis Días, los demás incidentes ocurrieron en momentos de tensión política que produjo una escalada que condujo a la guerra (caso “Hanit”) y/o a un estado de tensión prolongada. Aquí quiero introducir el incidente de la fragata USS “Samuel Robert” que si bien chocó con una mina marina iraní que casi lo hunde nos puede ayudar a comprender qué podría ser una situación punitiva dentro del marco de la diplomacia naval entendida como aquellas acciones navales que pueden emplear la fuerza sin que se llegue a una guerra formal o efectiva. La respuesta estadounidense a este incidente naval (Operación Praying Mantis) significó el hundimiento de una fragata iraní y averías graves a otra, así como daños a otras embarcaciones menores militares y daños a su infraestructura petrolera. A pesar de la gravedad de los hechos ninguno de los decisores políticos de Irán y EE.UU. buscaba una guerra y se produjo en consecuencia un proceso de desescalada debido a la situación estratégica imperante en la región. Esto nos lleva a las implicaciones estratégicas.
Implicaciones estratégicas.
En el escenario de conflicto que estamos viviendo los venezolanos hemos presenciado una escalada que, como indicamos al principio, se ha incrementado de forma sostenida manteniéndose aun en el plano de la diplomacia naval expresiva. Esto nos plantea cuatro espacios a ser considerados a la luz de las potencialidades del misil OTOMAT en circunstancias de crisis indeseables que no necesariamente conduzcan a un conflicto mayor como en los casos de la “Stark” o de los tanqueros: el Golfo de Venezuela, el mar de Venezuela, el tráfico de tanqueros a Cuba que puede abarcar todo el mar Caribe y la fachada Atlántica. De forma más específica podemos decir:
·         En el Golfo de Venezuela si se considera el problema existente de falta de delimitación de áreas marinas y submarinas frente a una condición de equiparación formal, insisto formal, de medios entre las armadas de Colombia[12] y Venezuela se puede llegar a una situación de crisis como la acaecida en el año 1901 o 1987[13].
·         En el mar de Venezuela si se consideran los incidentes de USCG “James” y el USS “Detroit” donde se observó un cambio cualitativo en cuanto a los medios empleados por el Comando Sur estadounidense que puede indicar una reevaluación constante de las amenazas aero-navales. Estos hechos dentro de un contexto signado por una débil capacidad estructural venezolana para ejecutar operaciones prolongadas desde su Caribe insular.
·         El mar Caribe en caso de que fuese interceptado un tanquero venezolano dirigiéndose a Cuba en función del potencial empleo de misiles antibuque lanzados desde aeronaves Sukhoi SU 30 invocando el estatus de un buque en el Alta Mar o para escalar en una crisis de forma deliberada[14]. Para ello se requeriría de una alta capacidad y disponibilidad operaciones de medios aéreos para responder de manera inmediata ante un evento de esa naturaleza.
·         La fachada Atlántica donde pudiesen usarse misiles antibuques lanzados desde aeronaves contra instalaciones petroleras.
Estos cuatro escenarios de crisis se pueden enmarcar dentro de la escalada de sanciones contra empresas involucradas en el envío de petróleo a Cuba y/o el sostenimiento de la tiranía. Junto con estas posibilidades se puede incluir también el papel que está jugando el grupo guerrillero colombiano ELN dentro del país y la participación de “asesores” militares de Cuba y países del Cercano y Medio Oriente. Como existe una alta potencialidad de que acaezca algo que genere una escalada con tantos elementos puestos en el tablero estratégico la pregunta que surge es por qué no ha acaecido nada. Creemos que la respuesta está relacionada en la conexión existente entre la crisis venezolana con otros tableros estratégicos donde todavía existe capacidad de maniobra por parte de los actores participantes en el juego. No obstante, la decreciente capacidad de maniobra de la tiranía en Venezuela con estas capacidades operacionales disponibles podrían apuntar a ser usadas para generar una crisis de modo le permita presentarse en el escenario de conflicto como un sujeto y no como un objeto de las relaciones internacionales.
Corolario
Creemos que el esfuerzo de la armada venezolana para realizar un evento de esa naturaleza fue considerable si se tiene presente el debilitamiento de la capacidad industrial y logística del país. Este esfuerzo se hace dentro de un contexto signado, en primer lugar, en la asunción de un país dependiente aun de las comunicaciones marítimas y fluviales como un país mediterráneo dentro de su estructura de planificación y, en segundo lugar, de disolución de la fuerza armada nacional como un todo. En todo caso, dadas las circunstancias, debemos prepararnos a que aumenten los incidentes marítimos en el futuro cercano con riesgos ciertos de que se produzca una mayor escalada de conflicto,


[1] Ver al respecto: DIPLOMACIA NAVAL: EL PUNTO CERO DE LA ESCALADA INTERNACIONAL DE LA CRISIS VENEZOLANA en http://edgareblancocarrero.blogspot.com/2018/08/diplomacia-naval-el-punto-cero-de-la.html, DIPLOMACIA NAVAL: DE LA INTERRUPCIÓN DEL TRÁFICO PETROLERO VENEZUELA-CUBA A LOS INCIDENTES DEL USCG “JAMES” Y USS "DETROIT" en https://edgareblancocarrero.blogspot.com/2019/05/diplomacia-naval-de-la-interrupcion-del.html , EL MAR CARIBE Y LA PERTURBACIÓN DEL TRÁFICO MARÍTIMO EN EL MAR ARÁBIGO en https://edgareblancocarrero.blogspot.com/2019/07/el-mar-caribe-y-la-perturbacion-del.html y LA GUERRA CONTRA EL TERRORISMO EN EL MAR Y LA CRISIS EN VENEZUELA en https://edgareblancocarrero.blogspot.com/2019/08/la-guerra-contra-el-terrorismo-en-el.html
[3] Cuando me refiero a alistamiento hablo del buque como plataforma y del misil en sí
[4] Ver al respecto: “Venezuela divorato dalla crisi, la marina si esercita con missili made in Italy: colpito un mercantile a 73 km di distanza” en https://video.lastampa.it/esteri/venezuela-divorato-dalla-crisi-la-marina-si-esercita-con-missili-made-in-italy-colpito-un-mercantile-a-73-km-di-distanza/110050/110056?
[5] Para el conocimiento de las especificaciones técnicas del misil, ver al respecto: Naval News e Hilo en https://twitter.com/navalnewsnet/status/1229135588290387973 y https://twitter.com/navalnewsnet/status/1229137362816524292
[6] Ver al respecto: “Venezuela: los misiles OTOMAT que viajaron a Cuba” en https://www.infodefensa.com/latam/2020/01/07/noticia-venezuela-misiles-otomat-viajaron.html
[7] Ver al respecto: “8 cosas que no sabías del caza Su-30 con el que Venezuela ha interceptado a un avión espía de EE UU” en https://es.rbth.com/technologias/83497-cosas-caza-su-30-venezuela
[8] En el año 2006 tuve la oportunidad de participar en un ejercicio de lanzamiento de un misil Exocet contra el destructor HNLMS “De Ruyter” con el fin de probar sus sistemas de defensa de punto. Vale decir que la trayectoria de este misil es diferente a la del OTOMAT y por ello es más vulnerable. No obstante ello, con la tecnología de la primera década del siglo XXI se podía batir un misil que vuele a una velocidad subsónica.
[9] Ver al respecto: “Hundimiento del destructor israelí Eilat, el inicio de una nueva era en el combate naval” en https://mundo.sputniknews.com/oriente-medio/201810211082882071-como-misiles-antibuque-abatieron-primer-blanco/
[10] Ver al respecto: “ATAQUE AL USS "STARK" ANALISIS TACTICO” en:   https://revistamarina.cl/revistas/1988/1/covacevich.pdf
[11] Ver al respecto: “Hezbolá revela cómo sus misiles destruyeron buque de Israel” en https://www.hispantv.com/noticias/el-libano/435566/hezbollah-ataque-misiles-buque-israel-guerra-33-dias , “Hezbolá muestra por primera vez imágenes del ataque a la corbeta israelí Hanit en 2006” http://spanish.almanar.com.lb/344555 y “Ataque misilístico a la Corbeta INS Hanit” en http://forotzahal.editboard.com/p1022579-ataque-misil%C3%ADstico-a-la-corbeta-ins-hanit
[12] Ver al respecto: “La Armada Colombiana dispara su tercer misil C-Star y prueba su torpedo DM2A3” en  https://www.infodefensa.com/latam/2019/07/25/noticia-armada-colombiana-dispara-tercer-misil-cstar-prueba-torpedos-dm2a3.html
[13] Al respecto ver: SOBRE LA UTILIDAD Y EL RIESGO: EL CASO DE LAS FUENTES HISTÓRICAS EN EL EVENTO NAVAL DE RÍO HACHA (1901) en https://edgareblancocarrero.blogspot.com/2020/01/sobre-la-utilidad-y-el-riesgo-el-caso.html y OPERACIÓN ESCORPIÓN: LA CRISIS DE LA CORBETA “CALDAS” EN UNA VISIÓN PROSPECTIVA en http://edgareblancocarrero.blogspot.com/2014/07/operacion-escorpion-la-crisis-de-la.html
[14] De igual forma se podría presentar una situación crítica en caso de una nueva interceptación de aeronaves de vigilancia electrónica en caso de que estas aeronaves de vigilancia estén escoltadas.

sábado, 1 de febrero de 2020

SOBRE LAS REVOLUCIONES VENEZOLANAS CON CALIDAD DE EXPORTACIÓN




Por el Dr. Jairo Bracho Palma

22 de marzo de 1896. El buque de guerra venezolano “Mariscal de Ayacucho”, salía de los astilleros de Martinica luego de algunas reparaciones contratadas por el gobierno nacional. Por aquello de las solidaridades románticas en recuerdo de la gesta independentista, en conflictos donde no nos han llamado y sobre los que poco o en nada podemos influir, el gobierno permitió la navegación como pasajeros de cuatro refugiados cubanos, miembros activos de la resistencia contra España. Cerca de las costas venezolanas, a los refugiados no se les ocurrió nada mejor que hacerse con las municiones y armas del buque, sobornando para ello a la tripulación. Las lealtades se dividieron. El encuentro terminó a machetazos por el control de la santabárbara. A la altura de Margarita, un incendio se propagó, pereciendo cuatro soldados de la guarnición y otro tanto de marinos. El buque fue remolcado hasta la Guaira, y en adelante sirvió para navegar a vela.
Sueños de la Gran Colombia.
Las solidaridades ideológicas regionales y las revoluciones con calidad de exportación nos han traído consecuencias desafortunadas. Las nostalgias por tiempos de glorias preteridas, de héroes forjados en titanio y la atrevida ignorancia de sus malas copias, han hecho el resto.
A lo largo de nuestra historia, algunos gobiernos se han empeñado en imponer sus criterios políticos a terceros países, un comportamiento por demás absurdo,  por el hecho de que una experiencia puede ser replicada si ha tenido éxito en condiciones debidamente medidas. Pero en casa, la experiencia no ha pasado de un completo y ruidoso fracaso con altisonantes pretensiones discursivas.
Septiembre de 1901. La navegación entre la fortaleza de San Carlos y Puerto Guerrero en el golfo de Venezuela transcurre con la habitual zozobra de vientos y corrientes encontradas. Las cubiertas de los vapores  “Zumbador” “Miranda” y “Crespo” semejan hormigueros atestados de reclutas que cargaban al hombro, un viejo máuser y algunas cápsulas. Por todo uniforme, los andrajos que llevaban puestos cuando fueron sorprendidos y maniatados por los jefes civiles en sus pueblos de origen. Los buques rolaban con fuerza. El mondongo anudado, los rostros lívidos, la mueca en el entrecejo. El vómito y demás excretas alejan los amagos de guapo de algunos veteranos que hacen de custodios. Los apuros estomacales dejan una pátina hedionda en cubierta que hace imposible caminar sin pagar el intento con un largo patinaje nada artístico. Aquello era una muestra de la naturaleza de una población pobre, sometida y emasculada.
En aquel manicomio de incertidumbres y resignaciones, destacaba Santos León, un mulato de 17 años, “enlazado” mientras realizaba sus labores entre los calurosos sembradíos de un pueblo de antiguos esclavos, Bobures, al sur del lago de Maracaibo, un 17 de junio de 1901. Una vez en la población de Paraguaipoa, intentó escapar, su madre viuda y de la que era único sostén, le esperaba; le detuvieron cuando pasaba por Sinamaica. Esta vez le amarraron de pies y manos. En Maracaibo le dieron un máuser con 30 cápsulas y lo embarcaron a bordo del vapor “Miranda”.
El 9 de agosto, Isabel Valencia, de apenas de 12 años jugaba con sus compañeritos en las calles empedradas de Coro, era un poco alto para su edad, pero bastó para ser considerado apto para cargar con la responsabilidad de un fusil. Manuel Hernández, un campesino de 50 años, bastante mayor para los estándares de la  época, fue arrestado en Barquisimeto, y remitido en tren hasta el puerto de Tucacas sin importar las protestas; le dieron un máuser y 50 cápsulas; quedó incorporado al Ejército Auxiliar Restaurador; fue embarcado  a bordo del vapor “Zumbador”. A los improvisados reclutas los dejaron en Puerto Guerrero, una apartada caleta en la costa oeste del golfo de Venezuela,  que languidecía entre cardones, zaguaros, montículos de arena y salitre. Marcharon hacia tierras colombianas. Luego de días de hambre, sed, y no pocos incidentes con la población guajira, llegaron a Carazúa. El ejército venezolano recibiría una vergonzosa derrota.
Las posibilidades políticas del partido liberal colombiano y de un resurgimiento de la Gran Colombia afiebraron la mente de Cipriano Castro, y lo condujeron a su fracaso militar más grande. Con unas tropas maniatadas como animales, sin entrenamiento, mal alimentadas, un pobre parque, y una escuadra carente de capacidad militar suficiente para una invasión en toda regla, hacía poco menos que probable el  éxito de semejante despropósito.
A pesar de que el país estaba en bancarrota, y con una  población con enormes carencias, Cipriano Castro jugó a la geopolítica y a las solidaridades ideológicas. A principios de 1900, facilitó el vapor venezolano “Augusto”, que trasladó armas y municiones de los liberales colombianos a las fortalezas de Puerto Cabello y del Zulia. En Puerto Cabello, el general mexicano Francisco Ruiz, comandante del “Augusto” recogió un segundo buque que la revolución liberal había comprado en Inglaterra con apoyo del gobierno venezolano. Fue llamado el “Rayo”. Las fortalezas venezolanas sirvieron de soporte logístico para las operaciones navales revolucionarias durante la Guerra de los Mil Días.
El 8 de mayo de 1900, Sarmiento desembarcó del “Rayo” y el “Augusto” en las costas de Rio Hacha: hombres, 1.800 fusiles “Marlincher” y 200.000 cartuchos. El “Rayo” y el “Augusto” fueron empleados en un ataque combinado de los liberales al mando de los generales Aníbal Ruiz, Plácido Camacho y Adán Franco, sobre las costas de Zapote, Departamento de Bolívar (8 de mayo de 1900 aproximadamente), además de otras acciones operacionales como el bombardeo a Boca Chica, el hundimiento del “Nelly Bazán”, el apresamiento en las bocas del Sinú del “María Hanaberg”, entre otras.
La invasión de Rangel Garbiras apoyada por tropas regulares colombianas y su derrota en San Cristóbal dio la excusa para devolverle a Marroquín la inesperada visita. Entre junio y agosto, Castro formó un ejército a toda prisa. La recluta fue especialmente violenta en Cumaná, Barquisimeto, Coro, Maracaibo y sus alrededores. A juzgar por el origen y calidad de los soldados, en el que se notaban la ausencia de los cuerpos andinos veteranos, aquello parecía una misión de represalia sin ánimo real de conquista.
El llamado “Ejército Auxiliar Restaurador” estaba compuesto por 1.400 hombres al mando del general José Antonio Dávila. Jefe de Estado Mayor: general Vicente Sánchez; Comisario de Guerra; coronel Juan Uslar; y Jefe de Parque, luego comandante de una compañía de “Sagrada”, coronel Carmelo Castro. Jefe de la Escuadra de Operaciones sobre Rio Hacha: teniente de navío Leopoldo Vicente Pellicer.
Así las cosas, el Ejército Auxiliar Restaurador salió de Maracaibo el 28 de agosto de 1901. El resultado de aquella temeridad tiene poco de glorioso.
Castro soñaba con rehacer la Gran Colombia. Sostuvo algunas conversaciones formales con el Presidente de Ecuador y con políticos colombianos para el fin de sus afiebradas inquietudes que terminó en testimonios de época, poca cosa más.
Tierras para los Bóers.
Finalizada la Revolución Libertadora, el general Cipriano Castro realizó una gira nacional entre abril y mayo de 1905. El itinerario comprendió varios estados. Comenzó por Miranda y Aragua, continuó por vía terrestre hacia Guárico y Apure, navegó por el Orinoco hasta Ciudad Bolívar, San Félix, Macareo, Pedernales, Margarita y Cumaná, terminando el periplo en la Guaira.
Castro ha estado atento a las noticias sobre la Guerra Anglo - Bóer, asunto que es práctica común en un político que se precie de estar informado. Pero, Castro no se conforma con saber, y no puede contener la impertinente necesidad de tocarles las pelotas a los ingleses que bastantes problemas estaban causando en las fronteras. Aquellos colonos de origen holandés nada tenían que hacer con nosotros, sin embargo, el general bóer Samuel Pearson ha sido invitado a la gira. Han conversado sobre un posible acuerdo de inmigración para los desplazados en África. Se tuvo previsto entregarles tierras de labor en el estado Bolívar. Las semejanzas suelen ser pasmosas.
Gómez y la Paz Mundial.
Para el gobierno de Juan Vicente Gómez, la Primera Guerra Mundial transcurrió entre sus negativas a tomar partido en el conflicto y sus preferencias por el prusianismo alemán. Si observamos sus fotografías oficiales: uniforme, casco y bigotes, una imitación del kaiser. Los nuevos uniformes, las evoluciones, la disciplina, el entrenamiento proviene de la escuela alemana por intermedio del coronel chileno Samuel Mac Guill.
El Departamento de Estado presiona al gobierno para que Venezuela tome el partido de la Entente Cordiale, su representante diplomático lo encuentra exasperante no lograr una respuesta definitiva por haber dos presidentes en ejercicio. En efecto, la Constitución de 1914 establece las figuras de un presidente encargado y de otro constitucional. Gómez tarda siete año en recibir su nombramiento de manos de  Marquez Bustillos.
El uso y abuso del pueblo para legitimaciones dudosas es un asunto que nos fuerza a una irónica mueca torcida. En 1913, Cesar Zumeta promociona una reunión de “plenipotenciarios de las municipalidades” para redactar la Constitución de 1914, creando la confusión más grande de nuestra historia, en un momento en que las libertades son conculcadas sin aviso previo, de hecho, el único candidato a las elecciones presidenciales del 13, un hombre valiente por demás decir, termina exiliado, y el proponente, como compañero de presidio de Delgado Chalbaud.
Sin perder pista a la naturaleza de su malicia, al mismo tiempo, y en semejanza con aquel marido acostumbrado a propinar palizas ruidosas a su mujer, pero magnifico anfritrión con sus camaradas del barrio, el gobierno promueve puertas afuera y sin éxito, una conferencia mundial de países neutrales para llamar a la paz, ingresa a la Liga de las Naciones en 1920, y se adhiere a sus convenios regulatorios. Rompe relaciones con México en 1923 por su apoyo a la oposición.
En 1913, el superávit y los saldos a favor nos hablan de que la economía de guerra interna es asunto del pasado. En 1918, la exportación de café alcanza el máximo volumen en toda su historia.  Por vez primera el petróleo aparece en la lista de las exportaciones en el año fiscal 1917-1918. En 1920 se redacta la primera legislación en la materia mientras el “reventón de los barrosos II” en 1922 anuncia que Venezuela dejará de ser rural, que olvidará el café, que abandonará el cacao. Antes de ello, vemos a un melindroso y muy activo José del Rosario García proponiendo exploraciones, exploradores y bancos para su sobrino. Taimado por formación, la eminencia gris del régimen influye hasta 1931 de manera decisiva en el ánimo del dictador. Le ha dicho que la oposición alienta una invasión norteamericana, tal vez un protectorado, le recomienda los mejores especialistas en relaciones internacionales para tenerlos de aliados, lo logra.
El Apoyo a la Revolución Cubana.
Se ha tejido toda clase de conjeturas sobre el Presidente Larrazábal y su ayudante Hector Abdelnour, sobre sus “diabólicas membresías comunistas”. Tuve la oportunidad de entrevistar al primero, y conocer su archivo personal. Larrazábal puede ser todo lo que usted quiera, menos comunista. En aquel entonces, Castro no se había declarado marxista. Como sea, Larrazábal estaba decidido a apoyarlo en Sierra Maestra.
Dicen que el infierno está lleno de bien intencionados. Larrazábal bien pudiera estar presidiendo este coro eterno. Lo cierto es que Larrazábal pretendía quitar del medio a Fulgencio Baptista y en cierto modo exportar la experiencia venezolana, no colocar un nuevo dictador sea del color que fuese, en lugar de aquel funesto sargento.
No sabemos cómo se conocieron, pero existe la certeza que la guerrilla cubana recibió apoyo del gobierno venezolano. Tres oficiales fueron fundamentales en esta operación: el contralmirante Carlos Larrazábal, Comandante General de la Armada, el capitán de navío Carlos Alberto Taylhardat y el capitán de fragata Héctor Antonio Abdelnour Mussa. Al respecto Carlos Taylhardat dijo lo siguiente:
En el año 58, el almirante Carlos Larrazabal me dice: " Carlos te he mandado a llamar porque te vamos a encomendar una misión secretísima, solamente la vamos a conocer 4 personas, Cóndor I que es Wolfgang, Cóndor II que soy yo, y Cóndor III que eres tú, eso no se lo vas a decir tú absolutamente a nadie, a nadie, te va crear muchos problemas con los oficiales superiores aquí, pero esto no lo vamos a saber sino 4 personas. El gobierno va a dar todo el apoyo necesario para apoyar a Fidel Castro, tienes rienda suelta para hacer todo lo que a ti te parezca conveniente, anda hablar con el Jefe de Armamento, Hugo Trejo y conversa con él a ver que es lo que se puede obtener. Fui y hablé con él y me dijo: "Mira nosotros tenemos el armamento que nos fue dado en préstamo de arriendo por los Estados Unidos, ya nosotros no lo utilizamos porque está descontinuado

El almirante Larrazábal aportó  Bs. 40.000 en dólares como viáticos. Se designó al capitán Abdelnour Mussa para comprar un avión. Fue a los Estados Unidos pero terminó comprándose a Avensa, ese avión se bautizó como  “Libertador”. Abdelnour Mussa venía de ejercer la segunda comandancia del Destructor “Almirante García”, pero el 1º de abril de 1958 fue nombrado edecán del almirante Larrazábal.  Desde Miraflores sirvió de oficial de enlace con Sierra Maestra.
El CF Aldernour compró una aeronave marca Douglas, Modelo Curtis C-46, serial 264, por cuenta de la empresa Compañía Anónima Agropecuaria Motilon, cancelando la suma de Bs. 284.380,00, pagados con dos cheques: uno por Bs. 190.380,00, banco Italo-Venezolano, cheque N° 438, y otro cheque por un monto de Bs. 94.000,00 del First National Bank of New York a favor de Aerovías  Venezolanas, S.A.
El “Libertador” salía de Caracas cargado de armamento, comida y  ropa una vez por semana para la Sierra Maestra. Allá se construyó un aeropuerto, que se utilizaba durante la noche. Por intermedio de las estaciones de radio aficionados, había comunicación con la sierra y se decía a que hora iba a salir el avión. Se había calculado que la aviación militar cubana necesitaba 20 minutos para llegar a interceptar  al  “Libertador”, era el tiempo máximo de descarga: Por ejemplo, el 25 de noviembre de 1958 salió de Maiquetía, entre muchos despachos,  el siguiente armamento: 11 cajas de 150 fusiles M-1 con porta fusil y tres cargadores cada uno; tres cajas con 30 fusiles automáticos Browning Cal. 30 con tres cargadoras llenos cada uno; cinco cajas con 10 ametralladoras con soporte y afuste; 35 cajas con 99.950 cartuchos calibre 30 y una caja con 100 granadas MKII. El conductor del vehículo que hizo el transporte hasta Maiquetía fue el señor Juan López. El  oficial que entregó el despacho: Carlos Alberto Taylhardat. El comandante guerrillero que recibió de manos del oficial las armas y municiones: Jiménez Moya.
La Operación contra Rafael Leonidas Trujillo
El General Rafael Leonidas Trujillo era un tema si se quiere, personal para los gobiernos adecos, y muy especialmente para Rómulo Betancourt.
La Marina de Guerra de Venezuela despachó armas y municiones hacia República Dominicana, en apoyo a la insurgencia contra Rafael Leonidas Trujillo. Algunos oficiales venezolanos fueron citados a declarar:
Primero si es cierto que el testigo, cumpliendo órdenes de la superioridad (ordenes dadas directamente por el general de brigada Martín Márquez Añez) en el mes de junio de 1959 despachó en Maiquetía una carga de material bélico, dinero raciones, equipos y hombres para que fuese entregado en Camaguey- Cuba a Fidel Castro, para invadir la República Dominicana El declarante se abstuvo de responder.

Un contingente de venezolanos y exilados aterrizó en una base de aquel país apoyados por un supuesto desertor de las Fuerzas Armadas dominicanas que en realidad era quinta columna. El resultado fue una masacre, porque los estaban esperando.
La Invasión a Haití.
Varios grupos de exiliados recibieron instrucción militar con el propósito de derrocar a Duvalier. El más fuerte de todos, era la denominada “Unión Cívica Militar” al mando del general haitiano León Cantave, un oficial de prestigio. Los líderes políticos de este movimiento, conocido como “UDN” eran Pierre Rigaud y Paul Verna. La situación de país, especialmente del Ejército, minimizado por la Guardia Personal de Duvalier, había colocado a las Fuerzas Armadas en franca descomposición. Para evitar que se levantaran, las tropas recibían solamente seis cartuchos por soldado.
El plan de operaciones contemplaba de manera general, la invasión el 15 de julio de 1964, atravesando la frontera, cerca del pueblo dominicano de Dabajón, para la captura del poblado haitiano de Quanaminthe. Las armas serían desembarcadas en “Fort Liberté”. Acto seguido marcharían sobre Cabo Haitiano. Varios objetivos en la capital serían sometidos a bombardeos: el cuartel general de los “Totons Macoutes”, el palacio presidencial y el aeropuerto de Puerto Príncipe, donde se encontraba la Fuerza Aérea (tres aviones “Munstang”). Se esperaba el apoyo de unidades clandestinas dispersas en la capital.
El material fue solicitado al Comandante General de la Marina venezolana, CA Ricardo Sosa Ríos. Constaba de: dos cañones ligeros; 100 fusiles semiautomáticos calibre 30: 50 ametralladoras de igual calibre: 20 ametralladoras; 100 revólveres calibre 38; 16 lanzagranadas entre otros. Armas para 150 hombres, y unos 10.000 dólares por concepto de soldada, que serían enviados en un buque de guerra que visitaría próximamente Santo Domingo.
A todo evento, hubo la intencionalidad de apoyo, toda vez que el CA Ricardo Sosa envió un delegado para corroborar los preparativos del intento de invasión desde República Dominicana. Unos 100 hombres al mando del general Cantave formaban aquella unidad. El Ministro de las Fuerzas Armada dominicanas estaba el tanto. Una unidad flotante fue enviada a finales de junio de 1963 como parte de la diplomacia naval en el Caribe, que enviaba el mensaje de dominio regional del poder naval venezolano y para tomar el pulso de la próxima invasión. Un viaje del oficial de enlace a Venezuela completó las coordinaciones preliminares.
El entrenamiento de los haitianos se realizó cerca de la frontera durante el primer semestre de 1963. No estamos seguros si el envío se materializó. A todas vistas, la dictadura de “Papa Doc” acabó en 1971 con su muerte.
Corolario
En suma, estos esfuerzos han sido de poco provecho para el país. Al fin de cuentas, las solidaridades automáticas y las empresas bélicas de corte  romántico son contingencias excepcionales en nuestra historia. La singularidad del caso venezolano consiste en que los gobiernos se embarcan en tales empresas cuando las condiciones internas son de gravedad, y con previsibles fines de permanencia en el poder.