lunes, 11 de abril de 2016

REFLEXIONES SOBRE METAESTRATEGIA Y METATÁCTICA







Jean Guitton realizó una obra denominada “El Pensamiento y la Guerra” una recopilación de Conferencias dictadas en la Escuela Superior de Guerra en Francia. En estas sus reflexiones indicaba el cambio radical que estaba sufriendo el fenómeno guerra por efectos de la disuasión Nuclear. El cambio a que se refería implicaba el traslado de la guerra a un campo muy poco conocido: la Mente, el pensamiento. La pregunta ahora es saber si ese cambio realmente se ha producido. Creo que desde el punto de vista humano no se ha operado un cambio, más bien ha cambiado el campo de batalla. Esto plantea otro interrogante ¿Qué es pensar estratégicamente?, ya que en el campo de la estrategia está subyacente la relación pensar-hacer, la adecuación medios-fines en donde la racionalidad está en los medios y en los fines. Esto nos lleva a intentar saber que es lo que se entiende  cuando se menciona la palabra estrategia puesto que nos ayudaría a entender el pensar la estrategia desde el pensar mismo. Por ello vamos a referirnos un poco a lo que generalmente se ha planteado desde la antigüedad para comprender la estrategia desde la perspectiva de la Ciencia y del Arte.

        
Como Ciencia la estrategia entendida ontológicamente pareciera ser un proceso de llevar las ideas a la acción tal como lo expresan Frischknecht y otros muchos pensadores.  Pero digo Ciencias entendida ontológicamente porque desde el punto de vista  epistémico se refleja un espíritu eminentemente Kantiano, es decir un proceso de adecuación de medios a fines.

Cuando nos referimos a Kant lo primero que viene a la mente son los juicios sintéticos a priori, las hipótesis, los pronósticos, las proyecciones etc.  También la razón pura centrada en la Ciencia y la razón práctica en la voluntad.

Tanto la razón pura como la razón práctica se expresan en el lenguaje. Cuando estamos hablando de Lenguaje estamos hablando de estructuras lógicas.  De la lógica del Primer Orden  del lenguaje científico, que se ha extendido mediante un proceso paulatino y sostenido de racionalización que ha abarcado el quehacer estratégico, al Campo de Ares. La estrategia en términos epistémicos se basa en esta estructura del lenguaje. Por ello se puede afirmar que cuando hablamos de la estrategia, estamos hablando de algo que es predecible no desde las perspectivas del pensar y del hacer sino de la perspectiva  del pensar mismo. Estamos hablando de un proceso deductivo donde solo están interviniendo como factores variables la voluntad y el tiempo.  Esta afirmación es sostenida no sólo por el hecho que estamos viviendo en un contexto globalizador signado en la racionalidad, la sociedad de la información, sino  por el tipo de enfrentamiento que hoy en día estamos presenciando. La voluntad es entendida en el sentido Clausewitziano del termino y el tiempo no es entendido en sentido aristotélico[1] únicamente, puesto que este con la técnica ha sido Racionalizado, más bien el tiempo entendido dentro de la misma estructura del ser.

La base lógica de esta racionalización la estableció Tarski al  afirmar  que A=A  Û   A=A con lo cual se fundamentó un criterio de verdad en las ciencias. Contemporáneamente con este autor, Kurt Gödel  estableció un Teorema  que indicaba  que el universo de la verdad es superior a la capacidad de nosotros para aprehenderla tanto desde las perspectivas de la razón pura como de la razón práctica.

Todo esto  ha hecho que el pensar y  el hacer hayan estado atrapados en el mejor de los casos en esquemas, modelos, procedimientos, doctrinas, métodos, etc., que eventualmente reflejan formas de dominación racional de carácter indirecto. Me explico: el Almirante Takeo Kurita no destruyó, según Kiralfy, a la fuerza de desembarco estadounidense en Leyte por la rigurosa aplicación del código del Bushido sino por seguir la Tesis Mahaniana de la batalla decisiva mediante el encuentro entre “buques”. En otras palabras, para el Almirante japonés el objetivo no fue la flota de desembarco sino la flota que protegía la flota de desembarco. Igual aconteció con la maniobra realizada por el Almirante Woodward, en las Malvinas. La maniobra inglesa fue concebida para engañar a las fuerzas argentinas que, al parecer, seguían la doctrina estadounidense.

Estas apreciaciones hacen que si consideramos a la estrategia como arte podría obtenerse una aproximación más cónsona con los propósitos que nos hemos establecido en cuanto a intentar entender el pensar desde el pensar mismo.

Pero si entendemos que nosotros pensamos también gracias al lenguaje, creamos también en función de una serie de patrones ya establecidos y desde esta óptica la estrategia podemos pensarla entonces desde patrones ya concebidos que nos evocan los trabajos de Charnay y Kuhn en el sentido que el paso de un conflicto interno a un conflicto internacional han representado cambios en la estructura del sistema y el advenimiento de un nuevo paradigma, pero como proceso este es un proceso Racionalizado. Por lo cual este crear en principio esta condicionado a modelos reales e ideales  que se presentan en los momentos de máxima negación en la realidad internacional.

Sí apelamos a la intuición desde el punto de vista Kantiano tenemos que esta es una aprehensión inmediata de la realidad por lo que podemos decir también que hay algún modelo aplicable para eliminar la diferencia  entre idealidad y realidad. Pero no para eliminar la diferencia de la idealidad en la idealidad y de lo que creemos es la realidad en la realidad (es decir, del hecho o del evento). En otras palabras, aquí nuevamente estamos enfrentados al problema de la internalidad o cartesianismo y la externalidad o el empirismo. Lo que hacemos está condicionado por nosotros y por los otros y viceversa. En este contexto el Teorema de Coddington parece demostrar las limitaciones del modelo racional.

Todo esto que se ha mencionado hasta ahora nos indicva que estamos enfrentados al problema de la Complejidad, incluso dentro de lo que nosotros entendemos como pensamiento. Por eso vamos a hablar de la complejidad pero entendida como una realidad que contiene aquello que la hace diferente. Habíamos hablado que la lógica del lenguaje de la ciencia A=A Û  A=A, pero ahora vamos a hablar de la lógica entendida como A=B  entendiéndose B como A + .

Originalmente nosotros hablamos de A=A  es decir, estrategia es el arte concebir, estrategia es cualquier secuencia meditada con anticipación de decisiones puntuales que trae un propósito especificado etc., o sea estrategia es estrategia si solo si estrategia es estrategia, pero fíjense en estas definiciones se observan diferencias ¿A qué obedecen estas diferencias? Podríamos afirmar que es a la estructura de acción de cada individuo, de cada grupo basada en costumbres.  Esta estructura de acción es un pensar-hacer individual-colectivo que siendo idénticos contienen diferencias, que como vimos históricamente se han sintetizados en un proceso de Racionalización, es decir, se ha tomado lo que identifica y se ha desechado la diferencia y lo que identifica es lo que nos ha hecho “Racionales” o mejor dicho predecibles.

Ahora ¿cómo podríamos definir estrategia dentro del contexto A=B?. Según Hegel  la identidad contiene la diferencia, nosotros somos idénticos, pero todos los días cambiamos es decir, todos los días dentro de la diferencia se mantiene la identidad, o sea, todos los días estamos sintetizándonos. La realidad esencial según Hegel es la realidad que aprehendida contiene la diferencia en aquello que lo identifica. Entonces uno de los problemas que ha prevalecido desde Kant es que la identidad no contiene la diferencia.

El concepto de Hegel se deriva del fenómeno, por lo que si retomamos las ideas iniciales del pensar y el hacer tenemos que si entendimos el pensar y el hacer como conceptos que contienen diferencias y entendemos el concepto como una idea en movimiento con la  realidad entonces tenemos un abanico ilimitado de opciones: la asimetría es una, el convencionalismo otro y el no convencionalismo otro. Por todo esto podríamos pensar en para esta relación del pensar y el hacer, de la adecuación de medios a fines este concepto de estrategia:

Estrategia es el aprovechamiento deliberado de los hechos intervinientes en un escenario de actuación dado generando nuevos marcos de Racionalidad”.

Pero si el pensar se manifiesta en toda la estructura del pensar y del hacer y ya de manera aproximada hemos abordado el pensar en el pensar-hacer, habremos ahora que abordar  el pensar en el hacer-hacer  asunto relativo a los medios en tanto que medios y a las formas en que estos son usados.  Este último punto nos remite el campo de la táctico, el campo de la ejecución, de los métodos, de los procedimientos  etc. asociados con los medios. En otras palabras, el ámbito de la racionalidad en general y de la creación en función de los espacios, pero sí la estrategia es el arte de concebir nuevos marcos de racionalidad, “la táctica es el uso de los medios en ese ámbito creativo donde no hay límites en el uso de dichos medios, ni limites de medios”.

El medio media entre la voluntad y el objetivo y el medio es cualquier cosa que puede ser usado en un espacio Multidimensional. Para los marinos esto no es una novedad y tampoco debería ser la idea de la no-limitación en cuanto al uso de los medios puesto que estamos presenciando un proceso de unificación del espacio por la vía del tiempo en sentido Aristotélico gracias a la fusión e integración de sistemas, pero nosotros somos el tiempo mismo y no el tiempo de los medios.

Con esto lo que se pretende es alcanzar una mayor flexibilidad en las decisiones en el ámbito marítimo no sólo tomando a este como Referente, sino que partiendo de allí expandirse al resto de los espacios, es decir, al resto de los ámbitos físicos y metafísicos para lograr una unidad impregnando de mar toda idea del espacio.  Consecuentemente, la doctrina no es la “doctrina”  o sea lo que hay que hacer de manera institucionalizada. La doctrina que determina el empleo de los medios es sólo el marco Referencial para establecer cuando se sigue o no. Con ello se quiere afirmar que lo que debe ser institucionalizado es la posibilidad de ruptura epistemológica y praxeológica puesto que la realidad nos esta desbordando. Hay que recordar que la tecnología es un medio y no un fin puesto que el fin es el hombre mismo.

BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA

ALBUJAS, Miguel. Cátedra de Ciencias Humanas y Concepción del Hombre. Caracas. UCV. 2004

BACETA,  Jesús. Cátedra de Problemas Epistemológicos de las Ciencias Naturales. Caracas. UCV. 2004.

BADESA, Calixto et Alii. Elementos de Lógica Formal. Barcelona. Editorial Ariel. 1998. 334 p.

BLANCO CARRERO, Edgar. Reflexiones sobre Estrategia Marítima en la Era de la Libertad de los Mares. 2ª edición. Caracas. Editorial Panapo. 2004. 302 p.

BRICEÑO, Miguel A. Cátedra de Problemas Epistemológicos de las Ciencias Sociales. Caracas UCV. 2004.

CHARNAY, Jean-Paul. Métastratégie. Systèmes, Formes et principes de la Guerre Féodale á la Dissuasion Nucléare. Editorial Económica. Instituto de Estrategia Comparada. París. 1990. 264 p.

COUTAU-BÉGARIE, Hervé. Traité de Stratégie. 2da edición. Económica. Instituto de Estrategia Comparada.  Paris 1999. 1005 p.

FRISCHKNECHT, Federico et alií. Lógica, teoría y práctica de la Estrategia. Buenos Aires. IPN. 1995. 271 p.

GUITTON, Jean. El pensamiento y la Guerra. 1ª Edición.  Instituto de Publicaciones Navales. Buenos Aires. 1972. 149 p.

HABERMAS, Jürgen. Ciencia y Técnica como Ideología. 4ª edición. Madrid. 1991. Editorial Tecnos. 181 p.

HEGEL, G. W. F. Lógica. 2ª edición. Madrid. Editorial Ricardo Aguilera. 1973. 372 p.


[1] La definición más sucinta al respecto es que el tiempo es el número del movimiento.

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