jueves, 19 de julio de 2018

HISTORIA OPERACIONAL DE LA ARMADA EN EL BAJO ORINOCO Y LA FACHADA ATLÁNTICA

Elaborado por Jairo Bracho Palma       

CONSIDERACIONES GEOECONÓMICAS

La fachada marítima Atlántica  está unida al sistema fluvial del río Orinoco[1], éste último se comporta como medio de protección. Separa dentro de multiplicidad de potenciales escenarios  muy difíciles de analizar en pocas líneas. Si usted observa bien, el Orinoco parte nuestra geografía en dos. Desde la perspectiva naval venezolana, la fachada Atlántica está dividida en tres áreas:

a) Área del Golfo de Paria: comprende  las costas de los estados  Monagas, Sucre y Delta Amacuro, desde el promontorio de Paria hasta punta Aguarapiche, limitando con el sur de la isla de Trinidad, con quien compartimos plataforma continental. Dos pasos son fundamentales para las comunicaciones: Boca de Dragon al norte, y Boca de Serpiente al sur. Varias vías fluviales hacen posible la comunicación hacia tierra firme: río San Juan, los caños Manamo y Macareo. Especial atención al pasaje Galleons, entre las islas Trinidad y Tobago, paso importante del tráfico marítimo, comunica el Caribe con el Atlántico, siendo prioritario para nosotros en razón del llamado ¨Terminal Marítimo Estratégico IV¨ (puertos de Colón, puerto Hierro, Guiria, Caripito, Pedernales y ciudad Guayana). El artículo VI del Tratado de Delimitación de Áreas Marinas y Submarinas entre Venezuela y Trinidad, permite el paso en tránsito por Galleons, pero es una derecho imperfecto, que bien podría ser suspendido unilateralmente[2].

b) Área del Delta del Orinoco: desde Punta Aguarapiche a Punta de Playa. Llamar vital a esta zona es precariamente descriptivo si consideramos lo abarcativo espacial, porque implica integrar  las regiones andina, llanera y guayanesa con las posibilidades de intercambio con los países de las costas de Europa y África, así como las correspondientes a las islas del Caribe Oriental y Brasil. El potencial económico de la región es un aspecto de no menor consideración. Por este espacio se comunican los terminales marítimos que se encuentran en el río Orinoco, salida natural a los productos mineros y en un futuro, de la faja petrolífera[3].

En el Delta abunda la pesca en área fluvial de Bagre rayado, Cachama, Coporo, Curbinata, Morocoto, Cajaro y Laulau, Lebranche, Lisa, Mero y Raya, además de especies de camarones diversos.

Petróleos de Venezuela Sociedad Anónima (PDVSA), han encontrado importantes yacimientos de petróleo con reservas probadas por el orden de los 235 mil millones de barriles de crudo pesado y extra-pesado, denominada Faja Petrolífera del Orinoco , que cuenta con cuatro campos de explotación: Junin, Ayacucho, Boyacá y  Carabobo, éste último se encuentra solapado por la entidad federal del Delta Amacuro; comprende yacimientos de gas natural con una cantidad estimada probada 40 BPC (Billones de pies cúbicos)  hacia el espacio marítimo.

Los intereses que sobre el Delta del Orinoco tienen Trinidad y Tobago, la República Cooperativa de Guayana, Barbados y Surinam, con las articulaciones disociadas que sobre el tema presentan las islas del Caribe Oriental, forman escenarios fractales al determinar un solapamiento potencial de sus proyecciones marítimas que podrían cercenar nuestra salida al Atlántico.

c) Área de la Guayana venezolana (conocido como Esequibo): desde Punta de Playa hasta la desembocadura del río Esequibo. Las costas de esta zona son bajas y cenagosas, con profundidades cambiantes por los movimientos constantes de barras y bancos de arena, lo que obliga a una navegación alejada de las costas. El espacio marítimo se extiende por 120 millas náuticas, la República Cooperativa de Guayana  se sirve de ella para establecer relaciones con aquellos países a los que ha entregado de manera arbitraria concesiones depredatorias al ecosistema y biomasa marítima en detrimento de las reclamaciones pendientes.

Tres importantes ríos atraviesan el territorio guayanés venezolano: el río Guayma (Wainía), a siete millas de Punta de Playa, su desembocadura se reconoce por las colinas de Cumakca. Es apto para buques de 10 pies de calado en época de lluvias. La población más cercana es la de Morawhana (en la intersección del paso de la Mora y río Barima). De allí  y del puerto Kaituma sale manganeso que se extrae a 66 millas aguas arriba[4].

La posición de Venezuela por más de doscientos años, sustentada en un hecho geográfico indudable, ha sido que la región comprendida desde Punta Barima  hasta la divisoria de aguas que separa el río Moroco de las aguas del Wainí es parte integral del Delta del Orinoco:

Constituye una unidad esencial o indivisibilidad geográfica y también política de la región[5]

La parte baja de la cuenca del Orinoco, entre Boca de Navíos y el Moroco al norte de la sierra de Imataca,  está formado por tres grandes ríos: el Wainía, Barima[6] y Amacuro[7] con sus respectivos afluentes, en el caso del Barima, a la altura del paso de la Mora, el fluyo y reflujo de corrientes en una dirección u otra de acuerdo la marea, lo convierte en un caño del Orinoco[8].

La dominación política y geográfica de esta cuenca y sus afluentes ha sido desde lo geopolítico histórico, fundamental para nuestra supervivencia como estado nación, pues quién controla estos espacios, dominan las bocas del Orinoco, el flujo económico tierra adentro, y potencialmente desde lo estratégico operacional, dominar militarmente el corazón de Venezuela. El que domina el corazón de Venezuela, domina América toda[9].

Cinco millas al NW de Punta Cozier se encuentra el río Pomerón, apto para la navegación de buques con trece pies de calado. Cerca se encuentra la villa de Charity donde se concentra la copra  de coco extraída de la zona[10].

El río Esequibo tiene una extensión superior a  600 millas náuticas, desemboca en un estuario de 24 kms de ancho. Buques de calado limitado pueden llegar hasta la ciudad de Bartica, 45 millas adentro, en la intersección con el río Mazaruni.

Es noticia comprobada que el límite de la antigua Capitanía General de Venezuela con la Guayana holandesa, era el río Esequibo. Sistemáticamente los españoles impidieron los asentamientos de holandeses, franceses e ingleses más allá de los ríos Pomerón y Moroco. Una consulta del gobierno holandés al gobierno británico  al referente (15 de junio de 1842), y al que tuvo acceso el Dr. Alejo Fortique, de grata memoria, despeja toda duda[11]. Dos hechos fundamentales en ese período ratifican la posesión inmemorial sobre el Orinoco, sus afluentes y espacio marítimo-territorial hasta el río Esequibo: la negación de los derechos de pesca holandés en el Orinoco, y la defensa fluvial establecida  por los Gobernadores de Guayana[12].

El río Demerara está 17,5 km al Este - Sureste del río Esequibo, ambos corren paralelos en una distancia de 320 kms. En su desembocadura tiene un ancho de 800 mts, y desciende a 400 metros cuarenta kilómetros río arriba. Su profundidad media es de 5,30 metros[13].

LA RÉMORA INGLESA

El apoyo que el gobierno del Reino Unido prestó a Venezuela en el proceso de Independencia tuvo una intencionalidad perversa, motivada por las ambiciones que dicta una codicia insaciable. La fase mejor acabada del imperialismo inglés puede considerarse poco menos que parasitaria. Venezuela sigue pagando en cuotas perpetuas el "apoyo británico".  En 1799  los ingleses repartieron tierras en Punta Barima que coincidió con la conquista de Trinidad, pero las guerras napoleónicas, la insuficiencia demográfica y de unidades militares empeñadas a escala mundial detuvieron lo que constituirá la obra mejor acabada del imperialismo del siglo XIX: la usurpación de 159.500 kilómetros cuadrados de Guayana y del Arco Amazónico como teleología de Estado para exportar dinero superfluo (inorgánico) y población superflua (excedentaria), en busca de equilibrar el dominio sobre su sociedad central y  periférica. El desplazamiento de hindúes, chinos e ingleses a aquellas tierras confirman este aserto. Las inversiones británicas en Venezuela se limitaron a empréstitos a una tasa de usura y con cuotas de humillación por medio de amenazas y restricciones. Jamás nuestro país pudo exportar productos a aquella isla en condiciones ventajosas.

En 1797, dos científicos alemanes enviados por la corona española daban cuenta de las potencialidades auríferas de Tumeremo, aquella noticia sacó de su habitual flematismo a buena parte del parlamento británico, para diseñar políticas específicas sobre la Capitanía General de Venezuela: 1) El control de las bocas del Orinoco ( materializada  en parte con la toma de Trinidad en 1799); 2) El apoyo a la causa de Francisco de Miranda, para en un movimiento paralelo a la invasión que haría el Precursor por el centro, y sin que éste supiera, conquistar Angostura y partir la Capitanía en dos, quedando nuestros amigos ingleses con los actuales estados Amazonas y Bolívar; 3) Fracasado aquel intento, el apoyo a la causa Libertadora; 4) La conspiración para defenestrar al Libertador, y fragmentar Colombia; 5) La eliminación de la Gran Armada colombiana[14]; 6) La utilización de antiguos combatientes ingleses en la Guerra de Independencia para la expansión al oeste del Esequibo. El Reino Unido temía a Colombia.

El Reino Unido destruyó Santo Tomé de Guayana en el año 1740,  tomó Trinidad  en 1799, ocupó asentamientos al este del río Esequibo en 1816, y su avance hasta el territorio venezolano tuvo su punto culminante con el Laudo Arbitral de París en 1899… con la firma del Tratado de Paria (1942) se detuvo el expansionismo inglés, sin embargo este acuerdo se concretó para facilitar al Reino Unido la explotación petrolera en la plataforma continental. La apertura petrolera permitió a la British Petroleum (empresa a la que pertenece el almirantazgo británico) acceder a concesiones en el Guarapiche, en el Delta Amacuro. Estos hechos permiten concluir que ha existido una continuidad histórica en cuanto a las pretensiones británicas en territorio venezolano[15]

Cumplida la desintegración de la Gran Colombia a manos inglesas, de su temible ejército y de su poderosa Armada,  la pretensión territorial del Reino Unido sobre el territorio del Esequibo  fue desplazando hacia el oeste del río la línea de demarcación en función de nuevos descubrimientos de oro que se hicieron evidente a partir de 1850, y que llegaron 1891 hasta el río Yuruarí, comprendiendo regiones como Guasipati y Tumeremo. Los reclamos ingleses nunca tuvieron un fundamento de derecho internacional[16].

La sentencia del Laudo de París (3 de octubre de 1899) tuvo tres características: írrito, ultrapetita e inmotivado. El hecho de no permitirse al gobierno venezolano ser parte del Tribunal, denota el profundo desprecio que sentían hacia nuestro gentilicio.

La posesión de isla de Patos y el farallón “El Soldado” se sumaron a la cadenas de conflictos, con ellos, negociaron con Venezuela otras ventajas que querían sin mezclar el problema del  Esequibo.  En resumen, el gobierno del Reino Unido alegaba pertenencia de una isla que estaba a 2,3 millas de costa firme.  El objetivo era lograr que el 30% de impuestos que se cobraba  en nuestros puertos a las mercancías antillanas fuera derogado. Finalmente, el 16 de febrero de 1942 se firmó el Tratado de Delimitación de Aguas Marinas y Submarinas, con ello, el Reino Unido tendría acceso a las potencialidades petroleras del Golfo de Paria, y parte de los yacimientos venezolanos, e ignoraron cualquier arreglo en el Esequibo. Tal vez habría sido una oportunidad para el Gobierno de Medina tratar este asunto con éxito aprovechando las inmensas dificultades que tenían nuestros avaros aliados en el frente de Guerra.

DIPLOMACIA DE CAÑONERAS EN EL ORINOCO

Las potencias marítimas tenían los ojos puestos sobre el sistema fluvial del Orinoco, su cuenca y la región donde prodiga sus aguas. Algunos estudios hablaban de sus inmensas potencialidades. Los estadounidenses, no iban a la saga de sus parientes anglosajones, más allá de declarativas políticas sobre dominio regional, los recursos minerales, especialmente el hierro,  ocupaban su atención; el oro y la posibilidad de comunicación con el rio Amazonas también eran de su interés. El 1895 el Departamento de Estado presionó en una tónica amenazante y bajo la bandera monrroista, su decisión de impedir al Reino Unido apoderarse del río Orinoco. Un programa naval para la construcción de buques fluviales con suficiente poder de fuego (Newport, 1890), respondieron a estos objetivos. La visita del “ USS Wilmington” a Ciudad Bolívar (24 de junio de 1899) fue más que un ejercicio de diplomacia naval, pues sirvió como mensaje  sobre la protección de los intereses de la  “Orinoco Iron  Company [17] encargada de explotar mineral de hierro en el caño Imataca (delta del Orinoco) en una concesión de 20.000 millas cuadradas, y con un  pleito pendiente con industriales ingleses; verificar las posibilidades para crear un eje Orinoco – Amazonas, estudiar nuevas explotaciones de hierro y oro, y consolidar aquellos espacios desde lo político estratégico[18].

Sería muy difícil rechazar la idea, de que la ayuda estadounidense a Venezuela durante el Laudo de 1899 aparte de los bien intencionados estudios universitarios que sobre los límites anglo británicos desarrollaron grandes especialistas norteamericanos, de la ética del Presidente Cleveland, del ex Presidente Harrinson y otros hombres públicos, el Departamento de Estado tenía su propia agenda, y se empeñó en proteger sus intereses y potenciales negocios, lo que en definitiva, más que un límite en Punta de Playa, lo que se hizo fue una división de ambiciones entre potencias. Los norteamericanos impedirían que los ingleses se hicieran con los recursos del río Orinoco.

Los estadounidenses siguieron en su empeño, en un contexto marcado por el declive inglés allende de sus mares y la amenaza alemana, que pese a llegar tarde a la repartición del mundo, pretendían posesiones coloniales en Venezuela, como la isla de Margarita. Durante la II Guerra Mundial, los norteamericanos trataron de crear una ruta expedita Orinoco – Amazonas para mover el petróleo desde el Lago de Maracaibo, salir a las costas del Brasil y de allí a los lugares  donde estaba el esfuerzo de guerra. Adentrarse en el corazón amazónico  significaba para los fines comerciales, nuevos minerales, especialmente los fisionables, alternativas médicas, recursos, pero también la ruta fluvial, que por su carácter estratégico, la habría convertido en la más importante del mundo, claro que el costo ecolgico﷽﷽﷽﷽﷽﷽to ecolmundo,clarocaros minerales, especialmente los fisionables, nuevas alternativas mel Reino Unido en su imperio osógico no fue considerado, pues los cándidos exploradores pretendían volar nada menos que 425 mil metros cuadrados de las milenarias rocas, esencia espiritual de las naciones originarias, de los rápidos de Atures, Maipures y Guahribos, usando 40 mil Kg de dinamita,  construir carreteras en Yavitá – Pimichin, entre otras propuestas que fueron consideradas por el Gobierno del General Isaías Medina Angarita[19].

El gobierno no tenía intenciones de hacer caso a este despropósito, consciente del abandono de las zonas del Barima, Amacuro y costas en general, y que por informes circunstanciados sobre el tema, había considerado la adquisición de lanchas para el reguardo litoral y fluvial.

  LA INGRATITUD COMO POLÍTICA DE ESTADO

Dos aspectos caracterizan la política guyanesa hacia el Estado venezolano, la ingratitud  y la deslealtad. Estos términos, tal vez incompatibles con definiciones académicas, son introducidas adrede para ilustrar muy bien la intencionalidad explicativa. Carente de un panteón de héroes nacionales, una amalgama de cultura y razas aún no compactadas alrededor del estado nación, y con unos vínculos neocoloniales llenos de complejos hacia sus antiguos amos, se hace necesario una creación en el imaginario colectivo de un enemigo común, al que había que afear y criminalizar:  Venezuela y sus ¨intenciones imperialistas¨. Observe usted las declaraciones conjuntas a favor de la posición de la ¨débil Guyana¨ que obtiene este país en la OECO, CARICOM y cuanto foro internacional se les ocurra. Venezuela ha sido útil como medio de cohesión nacional.

La República de Guyana cuenta con un incondicional respaldo de  su antiguo amo[20]. El acuerdo de Georgetown (15 de junio de 1967) permite a Guyana acceder a asistencia y entrenamiento británico. Los oficiales ingleses gozan de estatus oficial dentro del país ( Acuerdo del 26 de mayo de 1966). Desde la fecha mencionada, Guyana es miembro de la Commonwealth, reconociendo a Isabel II como símbolo de dicha asociación. Dentro de este organismo comunitario, existe el denominado "Comité de Defensa  del Commonwealth" que otorga una poderosa afinidad de ayuda recíproca y que se ha manifestado en circunstancias de crisis, contempla la ayuda inmediata en caso de una agresión local, y que de acuerdo a su magnitud podría crearse el denominado "Teatro de interés británico o Commonwealth". En la Declaración de Melbourne (30 de septiembre a 7 de octubre de 1981) todos los miembros de la Mancomunidad expresaron su preocupación por la reclamación venezolana y dieron su apoyo a Guayana[21], declarativa que los países miembros de la Organización de Países del Caribe Oriental y del CARICOM han hecho con insistencia en años recientes.

Desde 1965 hasta el presente, siendo indiferente el partido gobernante, la República de Guyana ha sido consistente en las premisas de su política exterior con respecto a Venezuela: 1)  El desconocimiento del Acuerdo de Ginebra (17 de febrero de 1966); 2) La validez del Laudo Arbitral de 1899, y su carácter no denunciable; 3) El otorgamiento sistemático de concesiones a compañías globales en el territorio en reclamación.

Entre 1965 y 2012, Guyana ha entregado un aproximado de 63 concesiones en el territorio en Reclamación. Estados Unidos encabeza la lista de concesionarios (38%), seguido por Canadá (36%). De  los cuales el 96% corresponde a la explotación de materiales estratégicos, siendo  un 50% para petróleo costa afuera. Los países del Tratado del Atlántico (ALCA) han diseñado un plan de desarrollo de potencias energéticas primarias emergentes (Guyana es una de ellas) para lo siguiente: 1) Exportadores sustitutivos de Venezuela, una forma alterna y específica de guerra económica, y en el binomio espacio tiempo de transporte de crudos. 2) Mantener los precios del petróleo a los niveles artificiales, de cara a  la pronta caída del volumen de extracción  de esquistos bituminosos, imposible de mantener por los costos de producción.

Los materiales considerados estratégicos  han salido para diversos centros industriales: petróleo, uranio, diamantes, oro, coltán, manganeso, entre otros. Estados Unidos tiene el 75% de concesiones petroleras costa afuera totales, y el 45% costa adentro. Dentro de estas concesiones no escapa la atención la trasnacional inglesa Shell,  aliada a la Exxon (Estados Unidos) para la explotación costa afuera, y dentro del territorio Esequibo. La Shell, es una de las empresas globales con mayores ganancias anuales. Canadá sigue en cantidad de concesiones recibidas para la explotación petrolera, siendo su fuerte en explotación de oro (44%), diamantes (13%), y petróleo (18%).

Brasil se ha concentrando en desarrollos de infraestructura y energía eléctrica (80%) seguido de uranio por razones ya conocidas. Su política exterior ha privilegiado históricamente las relaciones con la República de Guyana. Un estudio de Estado Mayor de 1972 hacía señalamientos que hoy parecen providenciales.

Las concesiones de materiales estratégicos han aumentado a un ritmo de aproximadamente el 100% por cada década. Estados Unidos y Canadá han sido los países de mayores incrementos porcentuales de sus concesiones con respecto a las décadas anteriores, con ello Guyana ha involucrado a ambos Estados en el diferendo,  maximizando el enfrentamiento existente en beneficio de sus intereses.

¿QUE HA HECHO LA ARMADA?
La presencia naval venezolana en el bajo Orinoco no nace del expolio territorial del río Esequibo. Pertenece a una prolonga práctica que comenzó en 1730. El peso de siglos de actividad operacional en aquellas áreas, habla de una Armada, señora de sus espacios marítimos y fluviales, con un ánimo de dominio que atajo legal alguno, o argumento crítico público de apariencia motivada, podría deshacer.

PERÍODO HISPÁNICO

La Compañía Guipuzcoana de Caracas tuvo un sistema de embarcaciones capaces de navegar a la sirga, y que custodiaban el río Orinoco, sus afluentes y parte de la fachada Atlántica (1730 -1781). Los Guardacostas y Corsarios de Caracas[22] ejecutaban los denominados límites de crucero. El sistema de cruceros[23] consistía en recorridos regulares a razón de tres anuales, sumado a los recorridos fijos de unidades apostadas localmente. La primera división de cruceros contaba con una lancha cañonera que debía cruzar desde Guayana a las bocas del Orinoco.  Dos lanchas corsarias guardaban la entrada del río Guarapiche[24]. Está práctica se ha mantenido hasta el presente, con actores y circunstancias diferentes.

Todo este despliegue de unidades navales se sostenía con un complejo cuerpo legislativo-operacional, y la institucionalidad militar naval española, la primera de ellas, la Real Compañía Guipuzcoana de Caracas, seguida por los “Guardacostas y Corsarios  de Caracas” (1783-1804) y la Real Armada de Puerto Cabello (1804 -1813). Podemos resumirlas en las siguientes:  a) El plan del CF Antonio Vicente Icuza, de cortas líneas[25]; b)  El Plan de Resguardo del Intendente Francisco Saavedra, el más completo de su tiempo en materia de operaciones, vigente hasta 1804[26];  El Plan Guillelmi (1789) hace énfasis en el resguardo sobre el río Orinoco[27]; c) Las instrucciones del CF Juan Antonio Careaga (1799)[28]; d) Plan del brigadier de la escuadra Agustín de Figueroa (1805), entre muchos otros.

En tiempos hispánicos  y en el siglo XIX, la navegación desde el Delta hacia el río Esequibo era de vientos y mareas encontradas, algo difícil para la maniobra de barcos a vela, razón por la cual usted no encuentra actividades de patrullaje frecuentes en las costas específicas del Esequibo[29], pero si por el sistema fluvial que se derrama en la región, logrando el mismo objetivo: un uso continuado, pacífico, un ánimo de dominio indiscutido. Para que usted tenga una idea de la fragilidad de los argumentos ingleses empeñados en demostrar que andaban por las selvas del Esequibo como en un día veraniego de Oxford, navegar por el Mazaruni o Cuyuní y remontar el río Orinoco implicaba subir unos raudales casi inaccesibles que podían demorarles hasta cuarenta días, circunstancias favorables para los españoles, asentados rio arriba,  quienes podían llegar a Kikojveral (intersección del Mazaruni, Cuyuní y Esequibo) en  diez días. La ocupación del territorio Esequibo estuvo limitado por lo demográfico, existieron serios programas de poblamiento mediante la evangelización capuchina, acompañado de lo militar, interrumpido por la Guerra de Independencia.

El objetivo estratégico operacional principal de este despliegue era el reguardo de la integridad territorial, como segundo objetivo, frenar el avance inglés en la fachada oriental de Venezuela; el objetivo tercero era la lucha contra el contrabando; finalmente, poner un freno a la propagación de la ideas francesas.

Capacidad naval:
La Provincia de Guayana históricamente ha sido el centro del despliegue operacional sobre el Orinoco y el Atlántico,  tuvo un permanente sistema de embarcaciones aptas para los fines de su misión, para ello contó con un Apostadero Naval, que sería capitanía, puerto y base militar; y con buques adecuados para la navegación en ríos y mar abierto.
Año
Cantidad
Base de Operaciones
Tipo de buque
Área de Recorrido

1730-1765

06
Angostura, Barima, Caroní, Caicara, Curiapo, Guiria
Balaux, lancha de fuerza, goleta
Bajo, medio y Alto Orinoco

1765-1775

10

Angostura, Barima, Caroní, Caicara, Curiapo, Guiria
5 lanchas, 1 falúa, 3 piraguas, 1 góndola holandesa
Caños del Tigre,  Noina,  Simara Macareo, y río de Barima,

1783-1803
(Guardacostas de Caracas)

8

Idem
Lanchas "San Vicente" y "San Francisco", 6 piraguas, balaux "Rambli", piragua "San Fernando"
Delta y  Orinoco medio. Caños Manamo, Pidemaves, Cocuyna y Macareo


1804-1813
Real Armada

7

Apostadero de Angostura
Lanchas cañoneras "Reina Luisa" y San Vicente", 5 piraguas

Río Orinoco

5
1 Lancha cañonera y 4 curiaras.
Cruceros desde Angostura hasta boca de navíos y caños
1
Apostadero de Cumaná
1 cañonera
Río Guarapiche
Apresamientos e incidentes


En Guayana había una notable cantidad de armadores particulares que durante el año de 1797,por ejemplo, hicieron varias presas inglesas[31]. Los gobernadores fueron exitosos con las iniciativas de perseguir los contrabandistas y los intentos de ocupación de territorio: "Un aproximado de 37 comisos hechos, entre 1767 y 1807. Según estos datos, que son parciales y sujetos a modificaciones futuras, los gobernadores y comandantes generales de Guayana, en las últimas tres décadas del siglo XVIII, efectuaron los siguientes comisos; Manuel Centurión 15, el gobernador interino José Linares 3, el sucesor de Centurión, Antonio de Pereda, 5, Miguel Marmión, 6 y los comandantes Luis Antonio Gil y José Felipe de Inciarte 8, entre ambos"[32].
El capitán Matheo Hernández de Ocampo,  enviado por el Comandante de Guardacostas al Orinoco en 1797, hizo varias presas en los caños del Orinoco, una de ellas en boca Cangrejos,  y repelió varias embarcaciones inglesas enemigas[33].  La ciudad de Angostura adquirió nuevos cañones, se construyeron algunas lanchas cañoneras, a la vez que en los canales más importantes del río Orinoco se colocaban estacadas para cerrar el paso a las naves de transporte de tropas inglesas[34].  Antes de su conquista, la gobernación de la provincia de Trinidad estaba construyendo varias lanchas cañoneras para su propia seguridad[35]. Los principales productos que se comisaban, se encuentra; el aguardiente, sebo, cueros y carne salada para abastecer colonias enemigas, objetos y alhajas de fabricación holandesa, esclavos y cacao, entre otros[36].

Los Apostaderos subalternos de Marina creados en 1805, constituyen la piedra angular del actual despliegue estratégico operacional de la Armada, con un alcance territorial total: Puerto Cabello, La Guaira, Maracaibo y Angostura. El posicionamiento físico de cada uno de ellos garantizaba el control de la ruta de los vientos (dominio del barlovento) de las áreas de recorrido de cada zona operacional, reducía las distancias de navegación y aumentaba la  vida útil de las embarcaciones, su abastecimiento y reparación oportuna, finalmente, involucraba a las autoridades locales en el uso de los medios navales como concepto integral de defensa[37]. La conquista de Trinidad y una posible invasión inglesa a Angostura mediaron en las ubicaciones.

El primer comandante del Apostadero de Angostura fue el AF Francisco Leceta.
En la fachada Atlántica, los apresamientos no fueron insignificantes, en razón del importe de las mercancías, con el caso de dos goletas apresadas por el bergantín de la Real Armada del Apostadero de Puerto Cabello "Argos" cerca de Trinidad, y del bergantín "Nueva Sociedad" apresada por el corsario "Gran Tigre" en las aguas de Guiria (1804). Ese mismo año   terminaron detenidas las piraguas “Nuestra Señora de los Dolores”, “Nuestra Señora del Carmen”, “Santa Teresa”, “San Juan Nepomuceno”, “San José” y el guairo “Santa Teresa”[38]. El 3 de abril de 1805 fue apresada la piragua “Rita”  por la “Reina Luisa”, los días  12   y 19 de julio  dos piraguas cargada de becerros y otros efectos  resultaron detenidas. Diez días después, una lancha y una piragua cargada de contrabando fueron llevadas al Apostadero, y declaradas por decomiso[39]. En Marzo de 1806, las piraguas del Apostadero apresaron  la lancha “Barr”, que fue rematada en pública subasta.  El número de presas entre 1804 y 1810 superaron las quince[40].

LA INDEPENDENCIA

Durante la época de la Independencia, la conquista de los espacios fluviales deltaicos, el control del bajo Orinoco y sus afluentes, y posteriormente de Angostura, permitieron el avance indetenible de las huestes libertadoras hacia el centro del país, Nueva Granada, Ecuador y Perú. El Almirante Luis Brión insistió al Libertador en esta premisa, empeñado como estaba en sus primeros años en tomar el centro, con los conocidos resultados[41]. El impacto que la campaña del Orinoco y la conquista de Angostura tuvo sobre el esfuerzo de Guerra es comentada en  carta que el Libertador le escribe a Luis López Méndez[42].
Constituida Colombia, el Decreto del 4 de octubre de 1821, creaba cuatro Departamentos de Marina. El Primer Departamento comprendía Guayana, Barcelona, Cumaná y Margarita. Su primer comandante, el CN Agustín Armario[43]. El puerto de Angostura tuvo un oficial de Marina a cargo, siendo su primer comandante, el CF José Tomás Machado a partir de 1820[44]. Ejerció el cargo de manera interrumpida hasta 1860.

Sería extenso explicar el movimiento estratégico operacional en el río Orinoco durante la independencia y como estado protonacional. Pero tres  actos de gobierno merecen reseñarse: el 17 de diciembre de 1817, el Congreso de Angostura decreta la creación de la Gran Colombia, quien dos años después define su frontera Este en el río Esequibo mediante comunicación oficial a Gran Bretaña. En 1819 el Libertador Simón Bolívar dio instrucciones en Londres Sr. José Rafael Revenga para que presentase una protesta formal ante el gobierno británico por las constantes violaciones del territorio en la margen izquierda del río Esequibo; y no menos importante, la flota fluvial más grande del mundo se enseñoreaba en las aguas del Orinoco, el Delta y Esequibo, protegían las rutas de navegación y comercio, el acceso a Angostura y como ejercicio de diplomacia naval al enviar un mensaje claro del poder de las naves republicanas, imprescindible en el contexto mundial de aquellos años.

Siglo XIX y período de la Restauración (1899-1908)

Disuelta Colombia y sus Departamentos Marítimos, el Apostadero de Guayana permaneció en funcionamiento

Capacidad Naval

En Angostura existieron en todo tiempo,  unidades navales que recorrieron el alto, medio, bajo Orinoco y la fachada Atlántica, a saber:
Año
Cantidad
Base de Operaciones
Tipo de buque
Área de Recorrido
1830-1835
03
Angostura
2 balandras de guerra y 1 caladora
Orinoco  y  Delta

1840-1845

05

Angostura- Ciudad Bolívar
 Caladora "Voluntaria"
Flechera "Lealtad"  y tres piraguas. Goleta "Boliviana".
Orinoco  y  Delta
1846 -1848
03
Angostura
Flecheras
Orinoco  y  Delta
1853-1855
02
Ciudad Bolívar
02 cañoneras
Orinoco  y  Delta
1856-1863
03
Ciudad Bolívar
01 vapor y dos flecheras
Orinoco y Delta
1888-1898

05

Ciudad Bolívar
Vapor “ Centenario”, vapor “ Libertador” (recorridos de programados) y 3 lanchas guardacostas (fijas)
Orinoco y Delta

1897

01

Ciudad Bolívar

Vapor “Centenario”
Revista a las poblaciones del Wainía, Amacuro, Barima y Pomerón. Ejercicio de Soberanía en el Esequibo
1899 -1908
02
Ciudad Bolívar
Guardacostas ¨General Gómez” y 3 lanchas.
Orinoco y Delta
                        [45]
Apresamientos en incidentes

Los incidentes y apresamientos realizados por unidades navales venezolanas estuvieron a la orden del día en la penncul ﷽﷽﷽﷽﷽ntes y apresamientos realizados por unidades navales venezolanas estuvieron a la orden del dal Servicio de Arsenal Navínsula  de Paria y en las bocas del Orinoco, generando fuertes incidentes diplomáticos con los ingleses, por causa de sus ciudadanos dedicados al contrabando. Barcos de maderas y hombres desnudos contra la soberbia inglesa.

En 1859 una cañonera venezolana apresó un barco inglés en la isla de Patos. En 1860, 1862 y 1864 continuaron los incidentes de apresamientos de las autoridades venezolanas, y los correspondientes reclamos diplomáticos[46].

Con respecto a la roca del Soldado, en 1867 se produjo un incidente cuando el Gobierno de Venezuela quiso establecer una base de Guardacostas en ese lugar. El Gobierno Británico, atento siempre a pelear un cubo de agua de mar aunque fuera, protestó, alegando estar dentro del mar territorial inglés.[47]

En 1872, se produjo otro apresamiento de un mercante inglés, con las correspondiente notas de protesta.  Las notas de 1883 y 1886 del gobierno inglés por nuevos incidentes y concesiones, ya eran amenazantes, sin mayores argumentos de los que concede la fuerza de la armas.

Y así llegamos al siglo XX, poco antes Venezuela, había sido despojada de manera humillante y sin derecho a defensa, de todo el territorio Esequibo, así que el sentimiento anti-inglés estaba presente en el colectivo. En 1901, un Guardacostas venezolano realizó una inspección a la isla de Patos, y apresó  venezolanos e ingleses, la respuesta no se hizo esperar, y como las miras estaban centradas sobre el incómodo presidente Castro, el tono de las discusiones era belicoso. Inglaterra se negaba a discutir la posesión de la isla[48].

Entre 1840 y 1900 la Marina de Guerra apresó unas treinta naves extranjera, con un 80% inglesas fueron apresadas entre el Delta del Orinoco, la fachada Atlántica y bajo Orinoco.

Período 1908 - 1945

En 1912, un Guardacostas Venezolano apresó un barco inglés en la península de Paria. Las protestas entre ambos países, terminaron favoreciendo a los ciudadanos ingleses, mediante indemnización[49].

La creación de la Compañía Anónima Fluvial y Costanera, obra del CN Román Delgado Chalbaud, con barcos tripulados en su mayoría por oficiales de la Armada tuvo una influencia definitiva para el uso racional de los recursos del territorio que rodeaba el Orinoco. El inmenso alcance geopolítico unido a los fines comerciales son evidentes. Podía explotar y reclamar para sí todas las minas que se descubrieran en el Amazonas, colonizar la zona, introducir crías de ganado de diversas especies,  fundar pueblos, traer inmigrantes extranjeros, fundar escuelas, servicios telegráficos, mantener los servicios públicos y de policía, etc.[50].

El  Plan  de Felipe Larrazábal

El 10 de octubre de 1934,  el coronel Director de Marina Carlos Sánchez, presentaba al Ministro de Guerra y Marina un plan de vigilancia de costas, que incluía las bocas del Orinoco, autoría del Inspector General de Marina, CF Felipe Larrazábal Blanco. La propuesta se hizo en un momento en que los ingleses traspasaban de forma impune la frontera para extraer madera y oro en la parte venezolana, existiendo un sólo funcionario venezolano sin lancha, sin comunicación y sin sueldo, y que habitaba un ruinoso edificio de Resguardo en la confluencia del Mururuma con el Barima. En 1944 se colocó un puesto de la Guardia Nacional, pero a 94 km, en San José de Amacuro[51].

Se consideró  la adquisición de varias embarcaciones italianas del tipo M. A. S., una tipología de lanchas multipropósito utilizadas con éxito por la Regia Marina italiana. El estado de las investigaciones del especialista en  el tema, señala que al parecer, llegaron al país ¨cuatro lanchas torpederas construidas en Italia del tipo M.A.S., una “grande”, posiblemente de 38 toneladas y tres “pequeñas” posiblemente de 30 toneladas, armadas con dos ametralladoras del tipo Mod. 1914 cal 6.5mm. El aparato motor utilizado por las mismas era del tipo diesel “Isotta Fraschini” [52]. Las negociaciones comenzaron en 1936, de acuerdo a una oferta hecha por la empresa italiana  “Oderon Terni Orlando”.

El Director de Marina elaboró un Plan de Resguardo con estas lanchas, luego impreso por el Ministerio de Guerra y Marina, en la Memoria y Cuenta de 1939. Si bien oficiales de la Armada se encargaron de evaluar y coordinar lo relativo a este proceso, las lanchas fueron a manos del Resguardo de Ministerio de Hacienda. Es asunto averiguado que los experimentos que han hecho instituciones ajenas a la Armada para el uso de buques han tenido un final de pena. Se trata que el uso del arma naval produce bienes intangibles, dislocado de los conceptos mercantiles. La seguridad es uno de ellos.
El Plan para el oriente consistía en colocar una lancha base en Curiapo, otras lanchas en Pedernales ( con jurisdicción en Macareo, la barra del Delta, y Cocuina, Pedernales, El Bagre, Maturín y Guariquén.  Otra cañonera en Guiria ( para recorridos en las ensenadas de Don Pedro, San Francisco, Uquire, hasta Tolete) [53].

No bien estuvieron en servicios estas lanchas cuando fueron sacadas del servicio y entregadas al Arsenal Naval. En septiembre de 1939 se construían cuatro (4) lanchas guardacostas para el Gobierno Venezolano en el "Greenport Bassin and Construction Company" de Greenport, L.I., N.Y”.[54]

EL PLAN DE DESARROLLO NAVAL  (1966-1970)


Entre 1945 y 1965 los planes navales estuvieron supeditados a la política exterior venezolana al hacerse públicos los papeles de Severo Mallet-Prevost. Una hábil y consistente reclamación en todos los foros posibles obligó a Gran Bretaña a aceptar una nueva negociación. Materia extensa que no trataremos en esta oportunidad.

Tres decisiones del Alto Mando Naval hicieron posible el despliegue definitivo  en los espacios fluviales en medio de un complejidad atajada por el gobierno en base a planes estructurados y que poco se amoldaban a la variación:  1) La aceptación del pensamiento estratégico operacional para enfrentar la incertidumbre, la eventualidad y el riesgo que significaba los cambiantes escenarios del entorno geopolítico, especialmente limítrofe; 2) La priorización de los escenarios limítrofes como esencia misional en la nueva etapa que se abría a la institución; 3) La visión del mar como espacio abstracto.

Lo anterior se transformó en: 1) El cambio organizacional; 2) La adquisición de terrenos e infraestructura terminada en el sur del país; 3) La ejecución del Primer Programa Naval para la sustitución del material existente; y adquisición de unidades fluviales; 4) La creación de presupuestos ordinarios por partidas, la importancia de esto no debe ser subestimado, hasta 1966, la Armada recibía presupuesto para funcionamiento, sin prever adquisiciones, mantenimiento, construcciones, etc.

El Decreto 288 del 27 de junio de 1958 permitía a la Marina de Guerra por vez primera administrar y ejecutar su propio presupuesto, esta medida fue fundamental para que la Armada mirara con seriedad, la posibilidad de crecer hacia el sur.

El Estado Mayor Naval  cumplía funciones ejecutivas y de planificación. Ambas fueron separadas, dejándole funciones de planificación. Mediante Resuelto ministerial 069 del 6 de marzo de 1963, el Comando General quedaba dividido en Comando General propiamente dicho, Estado Mayor Naval con las funciones actuales; la Jefatura de Operaciones, Jefatura de Personal y Jefatura de Logística. Las Bases Navales y la Inspectoría pasaban al mando directo del Comando General[55].

La llegada del CA Ricardo Sosa Ríos al Comando General tuvo una influencia definitiva en el despliegue  de la Armada en el territorio nacional. El 14 de septiembre de 1962, se creó el Apostadero Naval “Juan Crisóstomo Falcón”  en el Municipio Carirubana ( Estado Falcón)[56]. Los almirantes Jesús Bertorelli Moreno, Haroldo Rodríguez Figueroa, Justo Pastor Fernández Márquez, Ignacio Peña Cimarro entre otros, cada quien a su turno al frente del Comando General, se empeñarían en el despliegue naval en el sur e islas, así como la proyección en la fachada Atlántica.

Ese mismo año se traspasaba la posesión de las instalaciones de la "Orinoco Mining Company", que se convertirá en el Apostadero Naval “Francisco Javier Gutierrez”,  por la aprobación de la Cuenta al Ministro de Defensa Nº 005 del 10 de enero de 1968.

La creación del Apostadero Naval de Punta Barima el 24 de julio de 1969 viene a significar la consolidación del pensamiento estratégico operacional en la totalidad espacial[57]. En esta zona existe un faro desde 1857, lugar donde los prácticos del río esperaban las embarcaciones que se dirigía a Ciudad Bolívar.

En 1967, el Alto Mando Naval decidió la sustitución del material flotante existente, mediante un plan sistematizado de acuerdo a las nuevas directivas de CORDIPLAN. Este organismo consideró el “Programa Naval”,  paulatinamente pero en: “En proporción menor al crecimiento del presupuesto de desarrollo, el programa naval esta desvinculado del programa de gobierno del ejecutivo"[58].

Esto obligó a presentar proyectos con tres alternativas: máximo, medio y mínimo. Los gobiernos de turno en general siempre terminaban aprobando por debajo del mínimo[59]. Los proyectos de presupuestos fueron impuestos, no considerados. El Alto Mando creía que CORDIPLAN[60] tomaba con ligereza al sector defensa. 

Es nuestro parecer que la colonización efectiva del sur la ejecutó la Marina de Guerra a costa de un tremendo esfuerzo, con unos ridículos presupuestos que diseccionaban la escasa voluntad política para hacer realidad lo que se anunciaban en los planes quinquenales de la nación.

EL PROYECTO DE SISTEMAS FLUVIALES

El concepto de poder naval de los años 60 concebía el ejercicio de soberanía y de  "inviolabilidad de las fronteras". La doctrina que la Escuela de Guerra Naval de aquellos años estableció para el sur, entre otras muchas novedades, consistió en la construcción de ocho apostaderos, tres de los cuales estarían en Cristóbal Colón, Barrancas, Cabrutica y San Fernando de Atabapo, y que se denominó "Política y Programa Naval" (1962), proyecto establecido en 1947, y había quedado inconcluso. Este Programa Naval establecía una "Fuerza anti-contrabando" de dos unidades móviles con tres lanchas rápidas y tres helicópteros cada uno, dirigidos  especialmente para el bajo Orinoco y para la contención de los ingleses de Guayana y sus prácticas ilícitas [61].

En marzo de 1966, el Estado Mayor Naval  presentó el “Proyecto de Organización de la División Marítima Territorial del País”,  que tuvo como contradicción organizacional, los intentos del Ministerio de Defensa por dispersar las funciones de la Armada entre los cuatro componentes, y descentralizar el control de medios de la Comandancia General. Existía en el imaginario la idea de que la pérdida de controles financieros y de ejecución de obras de los Componentes, centralizado en el recién fenecido Estado Mayor General era obra de oficiales de la Armada, y como los asuntos de dinero producen enemigos mortales, este  no escapó de las manos de ambiciones mutiladas.

De esta manera nace la denominada “Frontera Marítima del Atlántico", concentrado en tres puntos focales: Boca de Dragos, Boca de Serpiente y Boca Grande. Queda establecido de ese modo las Regiones Navales, pasando a ser la Región Naval Oriental el espacio abarcativo del sistema de defensa fluvial, y sus distritos navales Nº 7 (Punta de Paria a Punta Barima) y Nº 8 ( Orinoco y sus afluentes) [62]

El Comando Fluvial "GB Frank Risquez Irribarren" (16 de junio de 1962)  materializó la primera fase de aquellos proyectos. Con sede en Puerto Ayacucho, una organización mixta flota-infantería, y el ejercicio de soberanía en el alto y bajo Orinoco, y sus afluentes[63].

La creación de un sistema de apostaderos fluviales distribuidos a lo largo del alto[64], medio y bajo Orinoco quedó plasmado en un Estudio de Estado Mayor elaborado en junio de 1972. Los problemas limítrofes y las consecuencias asociadas (narcotráfico, explotación minera y maderera, tráfico de ilegales, ataques a venezolanos, poco poblamiento), así como el apoyo brasileño al caso guayanés motivaron la iniciativa. Este estudio tuvo una consideración política importante, porque al visualizar que el río Orinoco dividía en partes casi iguales el territorio nacional, se hacía necesario integrar el sur a la dinámica política, económica y social de la nación mediante puestos navales de avanzada que defendieran las garantías ciudadanas. El VI Plan de la Nación recogería este postulado[65].

Los Apostaderos fueron creados para cumplir  misiones estratégicas (punto de concentración de movimientos militares y avanzada de iniciativas civiles) y tácticas (defensa, seguridad, policía y apoyo a la comunidad), tomando como centro de apoyo el llamado Apostadero Logístico de Cabruta, que serviría como terminal terrestre y marítimo para el sur, complementado con una pequeña base aérea en Caicara.

Las carencias presupuestarias hicieron que los primeros apostaderos tuvieran fundaciones improvisadas. Puerto Páez, Samariapo, San Fernando de Atabapo, San Carlos de Río Negro fueron los primeros en ser considerados. La concentración de fuerzas fluviales colombianas en Puerto Carreño y Orocue, así como fuerzas brasileñas en  Manaos motivaron estas fundaciones.

Para el momento, una flotilla de lanchas patrulleras PF-11 (Guaicaipuro) y PF -12 (Tamanaco); PF-21 (Manaure) y PF- 22 (Mara) y otras 25 embarcaciones menores desarrollaban operaciones en el Orinoco medio y el Delta.

 El 9 de julio de 1981 la Armada creó las denominadas "Zonas Navales", que coincidió con el planteamiento del Alto Mando Naval para la creación del "Comando Operacional Estratégico" en 1980 (antecesor del actual Comando Estratégico Operacional) y que buscaba separar las funciones administrativas y de formación de las operacionales.


De tal manera que la Armada dividió su ámbito operacional en Zonas Navales de Occidente, Centro, Oriente con alcance en la fachada Atlántica, y Fluvial. Las Zonas Navales del Centro, Atlántico y Sur (Caicara) quedaron en el papel, pero demuestra la voluntad de la institución.

En 1982, el Alto Mando Naval planteó la necesidad de desarrollar apostaderos fluviales en los sistemas  Cuyuní - Venamo, Barima y Amacuro. El parte de campaña de la maniobra "Libertador I" (1981) había determinado las debilidades en estos sectores. Se presentó un plan de desarrollo por Bs. 68.300.000, sólo fueron aprobados Bs. 24.900.000. En ese mismo Plan, otros componentes obtuvieron 107 millones y 48 millones para unidades que no estaban en sitios considerados inhóspitos y fronterizos,  centro de la cuestión.

 El bajo Orinoco contaría con el "Comando Fluvial Nº 3" con sede en Tucupita (isla de Guara), que sería a su vez apostadero. De este comando dependerían los puestos Fluviales de Punta Barima; Pedernales (Capure) y Curiapo; y el Apostadero de Cuyuní - Venamo con sede en Anacoco. El plan de adquisiciones consideraba medios aéreos (Bs. 22.150.934); unidades flotantes (Bs. 3.324.533) y equipos de levantamiento batimétrico para el sistema Cuyuní - Venamo[66]. Tambien se creó el Comando Fluvial Nº 1 con sede en San Carlos de Río Negro, desplegado en el apostadero de San Fernando de Atabapo , que controlaba los puestos de Venado, Tama / Tama y Yavita); el Apostadero de San Carlos de Río Negro ( y sus puestos de Maroa y Santa Lucía): El Comando Fluvial Nº 2, con sede en Puerto Páez (con los puestos de Buena Vista, Cararabo y Carichana); el Apostadero  "Frank Risquez Irribarren"; Apostadero del Amparo (con los puestos de Puerto Infante y la Victoria) y el Apostadero Logístico de Caicara.

Parte de esto no se materializó porque CORDIPLAN manifestó falta de disponibilidad por la crisis económica que comenzaba en el país. Algo determinante fue el aumento de la paridad cambiaria de 4,30 bolívares por dólar a 7,30, todo un suceso en aquel tiempo[67].

En el Plan Quinquenal de desarrollo de la Armada (1981-1985) contemplaba la adquisición de sistema de buques LSM (proyecto 1-6) y lanchas patrulleras fluviales (proyecto I-12) [68].En el quinquenio siguiente la Armada dio continuidad a la consolidación  de los puestos del Sur del País, con énfasis en la infraestructura y unidades flotantes[69].

LA BASE NAVAL FLUVIAL "TOMÁS MACHADO"

En 1984 llegaron nuevos patrulleros fluviales clase IV de 8,9 Mts. de eslora como la PF- 41 ( Puerto Páez); la PF- 42  (Puerto Ayacucho) y 43 (Caripito); y dos patrulleros clase III,  PF-31 ( la Victoria) y PF -32 ( El Amparo) [70]; la gabarra  Manatí ( RM I-333 del 27 de enero de 1987). El Plan de Desarrollo Naval (1985/1990) contemplaba la adquisición de ocho patrulleras fluviales de 12 a 14 Mts de eslora y 22 lanchas de 28 pies[71].

El 18 de enero de 1984 el Comando Fluvial quedaba formalmente inaugurado, una unidad creada por la conjunción de varias iniciativas, especialmente del CN Tomás Mariño Blanco en 1982. El capitán Mariño había sido muy insistente en no sólo crearlo sino que su esfuerzo operacional fuera hacia el bajo Orinoco y el Delta con especial énfasis en los ríos Barima y Amacuro.

En las viejas instalaciones de la Aduana, que también sirvieron de sede del Real Apostadero de Angostura (1805) y del Apostadero de la República (1821-1875), se inauguró la Base Naval Fluvial "Tomás Machado" el 24 de julio de 1984 con las asistencia del VA Justo Pastor Fernández Márquez, Comandante General de la Armada.   El primer titular de la Base, el CA Escobar Ochoa. Esta unidad fue creada el 18 de junio de 1984 (Resolución M- 0228) con sede en Ciudad Bolívar. Ese mismo año se creó el Comando de la Fuerzas Fluviales (15 de julio) y arribaron los transportes tipo LCU (Landing Craft Utility) de 428 toneladas y 13 nudos de velocidad  "Margarita"(T-71) [72] y la "Orchila" (T-72) [73].

La importancia de esta nueva base era la cercanía a las bocas del Orinoco y sus afluentes, que permitía continuar con el desarrollo de aquella zona, obviando la contrapropuesta de hacerlo en Puerto Ayacucho[74].

La presencia de nuestras tripulaciones en caños y ríos ha sido constante: Cangrejito, Curiapo, Boca Grande, Matanzas, el Rosario, Angosturitas, los ríos Arature, Barima, Grande, Amacuro, caños Socoroco, Santa Catalina, Fajardo, Macareo, Chirere, han sido testigos de estas acciones, que han reducido la incertidumbre entre sus pobladores, y garantizado el ejercicio de soberanía[75].

El 16 de abril de 1987 es creado el Puesto Naval de San José de Amacuro. Un año antes (19 de enero) se creó la Unidad de Adiestramiento Fluvial.

El Acuerdo Interinstitucional entre el Ministerio de la Defensa, Relaciones Interiores y Sanidad del 1 de octubre de 1986, le permitió a la Armada llevar acciones efectivas a las poblaciones ribereñas, sólo en 1986 por ejemplo, las Fuerzas Fluviales, atendieron 102 poblaciones, más de 7.000 tratamiento médico odontológico,  3.434 vacunaciones, 2.100 damnificados, 1.200 raciones de alimentos y un derrame de hidrocarburos. En el caso específico del bajo Orinoco, la presencia fue constante en las siguientes poblaciones: Sacupana, el Toro, Curiapo, Punta Yautica, Cangrejito, Boca de Aragua, Boca de Araguaito, Juncalito, Tortuga, Araguaibisis, Quiniquina, Misión de Araguaimujo, Cabrián, El Consejo, Tres Caños, Santa Rosa, Orocoima, Manoa, La Horqueta, Los Rastrojos, San José de Amacuro, Cuyubini, Wausam y ribera del río Amacuro[76].

Algo importante que debe tener presente el lector es que la presencia de la Armada en los ríos tiene carácter estacional, vale decir, la capacidad de movilidad está supeditada a los períodos de lluvia y sequía.

Las operaciones fluviales de gran envergadura han sido materia de cumplimiento obligatorio, un promedio de 4 anuales (Baba, Balajú entre otras).

PRESENTE Y PERSPECTIVAS

El plan de sistemas fluviales cumple 47 años, sin embargo, los comandos de turno mantuvieron una cualidad que pareciera contracultural, como es la continuidad programática, como se demuestra en el cuadro siguiente, y por ejemplo, con la creación de un puesto fronterizo en Anacoco, responsabilidad que se comparte con el Ejército (2005). Los patrullajes aéreos y fluviales han causado enorme inquietud en la Cancillería guyanesa.

Por Gaceta oficial Nº 3990 del 30 de marzo de 2012, nace la Quinta Brigada de Infantería Fluvial “CF. JOSÉ TOMÁS MACHADO”, con sede en la ciudad de Ciudad Bolívar en el Estado Bolívar, el siguiente cuadro demuestra el avance y la consistencia  que ha tenido este programa:

ENTIDAD
TIPO DE UNIDAD MILITAR
GUÁRICO
-Puesto Naval “CABRUTA” (Pertenece a la 6ta Brigada de Infantería de Marina con sede en San Fernando de Apure en el Estado Apure).
BOLÍVAR
-Comando de la 5ta. Brigada Fluvial “CF JOSÉ TOMÁS MACHADO”.
-Comando Fluvial de Infantería de Marina “GRAL. DANIEL FLORENCIO O´LEARY”.
-Puesto Naval “ORINOCO”.
-Puesto Naval “PUERTO ORDAZ”.
-Comando Fluvial de Infantería de Marina “GJ. EZEQUIEL ZAMORA”.
-Puesto Naval “LA PARAGUA”.
-Puesto Naval “URIMAN”.
-Puesto Naval “SAN SALVADOR DE PAÚL”
-Comando Fluvial de Infantería de Marina “JOSÉ MARÍA ESPAÑA”.
-Puesto Naval “CAICARA”
-Escuadrón Fluvial “CN. ANTONIO DÍAZ”.
-Grupo de Caballería Aérea “TN. PEDRO LUCAS URRIBARRI”.
-Batallón de Apoyo Fluvial “AF. VICENTE PARRADO”.
MONAGAS
-Puesto Naval de “BARRANCAS”
DELTA AMACURO
-Puesto Naval “SAN FRANCISCO DEL GUAYO”
-Puesto Naval “RÍO AMACURO”
     [77]

La mayoría de los puestos fluviales arriba citados son de reciente creación como por ejemplo, el Puesto Fluvial de San Francisco de Guayas, Delta del río Orinoco, en funcionamiento desde el 2008.

El proyecto para  el apostadero fluvial de Curiapo y la Brigada Fluvial 53º en Tucupita constituiría un nuevo paso hacia la consolidación de la presencia de la Armada en los espacios fluviales del bajo Orinoco.

RESEÑA DE INCIDENTES

Los apresamientos e incidentes demuestran la presencia efectiva en aquellos espacios, tal como se demuestran en el siguiente cuadro con muestras representativas:


Fecha
Presa
Apresador
Ubicación
Causa





1995
31OCT
SHOOL 86
Rastropesca estadounidense
FEDERACIÓN PC-12
PATRULLERO DE COSTA
Atlántico
09º 35’ N
60º 23 W
Pesca ilegal
1996
13DIC
BIG ZAPPA
Pesquero guyanés ARV

MARA PF-22
PATRULLERO FLUVIAL
Río Orinoco
08º 45’ N
60º 19,5 W
Apresamiento
1995
16NOV
BLACK MARTIN
Yate estadounidense
GENERAL MORÁN GC-12
GUARDACOSTAS PESADO
Los Testigos
Identidad dudosa
1996
14ENE
CAPTAIN EDDY
Rastropesca trinitobaguense
PATRIA PC-15
PATRULLERO DE COSTA
Atlántico
10º N
62º W
Pesca ilegal
1996
16ENE
MISS SUZANNE
Rastropesca trinitobaguense
PETREL PG-31
PATRULLERO GUARDACOSTAS
Atlántico
09º 57.7’ N
61º 14.5’ W
Pesca ilegal
1996
16ENE
OCEAN TIDE
Rastropesca trinitobaguense
PETREL PG-31
PATRULLERO GUARDACOSTAS
Atlántico
09º 57.7’ N
61º 14.5’ W
Pesca ilegal
1996
18ENE
CASSANDRA
Rastropesca trinitobaguense
PATRIA PC-15
PATRULLERO DE COSTA
Atlántico

Pesca ilegal
1996
23ENE
D’ FLY
Rastropesca trinitobaguense
PETREL PG-31
PATRULLERO GUARDACOSTAS
Atlántico
09º 49.8’ N
61º 52,5’ W
Pesca ilegal
1996
23ENE
AMANDA
Rastropesca trinitobaguense
PETREL PG-31
PATRULLERO GUARDACOSTAS
Atlántico
10º 49,8 N
65º 59,6 W
Pesca ilegal
1996
23ENE
THE WHISPER II
Rastropesca trinitobaguense
PETREL PG-31
PATRULLERO GUARDACOSTAS
Atlántico
10º 49,8’  N
65º 52,6’  W
Pesca ilegal
1996
24ENE
PEPE III
Rastropesca trinitobaguense
PETREL PG-31
PATRULLERO GUARDACOSTAS
Atlántico
09º 50.5’ N
61º 16’ W
Pesca ilegal
1996
28ENE
FAITH 84
Rastropesca guyanesa
PETREL PG-31
PATRULLERO GUARDACOSTAS
GENERAL SALOM F-25
FRAGATA
Zona en reclamación
08º 46.2’ N
59º 24.0’ W
Pesca ilegal
1996
07FEB
OCEAN LILY
Rastropesca trinitobaguense
CONSTITUCIÓN PC-11
PATRULLERO DE COSTA
Atlántico

Pesca ilegal
1996
18MAR
DEFIANT 88
Rastropesca guyanesa
GENERAL MORÁN GC-12
GUARDACOSTAS PESADO
Atlántico
09º 09’ 01” N
59º 57’ 09” W
Pesca ilegal
1996
18MAR
ZODIAC 88
Rastropesca guyanesa
GENERAL MORÁN GC-12
GUARDACOSTAS PESADO
Atlántico
09º 09’ 01” N
59º 57’ 09” W
Pesca ilegal
1996
13SEP
L/M BIG ZARPER
Guayanesa

PF MARA (PF-22)
Delta del Orinoco
Milla 13,9
Pesca illegal. Inmigración ilegal
1996
30OCT96
HANNAH
Rastropesca trinitobaguense
MARGARITA T-71
TRANSPORTE
Atlántico
09º 58,2’ N
61º 39,6’ W
Pesca ilegal
1997
28ENE
RIEGEL (TFS-2061)
Peñero trinitobaguense
PETREL PG-31
PATRULLERO GUARDACOSTAS
Atlántico
09º 50,2’ N
61º51,3’ W
Pesca ilegal





2000
11AGO
Rastropescas “CAP CHAD 97”; CAP LEE 99” y “TROPIC 99”
SAINT VICENT

¨GENERAL MORÁN” (GC-21)
8º 33,4  N
059º 01,9´W
Pesca Ilegal, tripulación illegal
2000
23AGO
Rastropesca “NEVILLE”
Guyanesa

ARV “COLIMBO”
(PG -406)
Atlántico (ZEE)
08º 54´N
059º 12´ W
Pesca ilegal
2000
23AGO
Rastropesca “ REAL MACOY”
Guyanesa

ARV “COLIMBO”
(PG -406)
Atlántico (ZEE)
09º 13,3 N
06º 3,3´ W
Pesca ilegal
2000
23AGO
Rastropesca “ NEVILLE”
Guyanesa

ARV “COLIMBO”
(PG -406)
Atlántico (ZEE)
09º 37,7 ´N
059º 35,2´W
Pesca ilegal
2001
17JUN
L/M AVINA
trinitobaguense
¨GENERAL MORÁN” (GC-21)
Atlántico
8º 36,8´N
059º 7,6´
Pesca ilegal
2001
18JUN
“DELTA 98”
Rastropesca guayanesa
¨GENERAL MORÁN” (GC-21)
8º 33,4  N
059º 01,9´W
Pesca ilegal
2001
24JUN
L/M “ CAROLINA”
PG-407
“FARDELA”
Atlántico
10º 25´ N
060º 00´W
1800 Kg. De Cocaína, capturada y entregada por la fragata francesa “ Ventosa” (F-733)
2001
14SEP01
“MELANIA”
rastropesca venezolana”

ARV “COLIMBO”
(PG -406)
Golfo de Paria
Pesca en zona prohibida
2003
13SEP
Dos lanchas: “sin Nombre¨ y  “ SUNNY”. Guyanesas
ARV -71
MARGARITA
Orinoco. Milla 51
En dirección a Guyana. Tráfico de combustible.
2003
09 SEP
Dos embarcaciones : “PISCESS BOY” nombre “MISS ARIMA”
trinitobaguense
PG-407
“FARDELA”

Punta Barima
Inmigración ilegal
2004
03 lanchas
guyanesas
PG-407
“FARDELA
Río Amacuro
Contrabando de gasolina
2006
04 lanchas guyanesas
ARV “COLIMBO”
(PG -406)
Caño manamo
Inmigración ilegal
2007
04 lanchas guyanesas
PG-407
“FARDELA
Delta del Orinoco
Pesca ilegal
2008
03 lanchas
guyanesas
ARV “COLIMBO”
(PG -406)
Rio Barima
Inmigración ilegal. Contrabando de combustible
2010
05 lanchas guyanesas
PG-407
“FARDELA
Milla 50
Pesca ilegal. Inmigración ilegal
2013
14OCT
CAPITOL OF PARADISI
trinitobaguense
AB PO-04 “KARIÑA¨
10º 13,9’ N
056º 14,1 W
Pesca Ilegal
Sin siglas
2013
10OCT
PLATAFORMA PETROLERA “TERNIK PERDANA”
Bandera Panameña, prestando servicio al gobierno guayanés
AB “YEKUANA (PO -13)
Atlántico (ZEE)
10º 18,45´ N
057º 32,5´W

Exploración petrolera no autorizada en ZEE
2013
19OCT
“SUKAM 18”
trinitobaguense
AB PO-04 “KARIÑA¨
9º 42,5 N
060º 53,5 W
Sin documentos
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Como se observa en el cuadro anterior, las nuevas amenazas densifican los escenarios ico  ﷽﷽﷽﷽﷽serva en el cuadro anterior, las nuevas amenazas en el escenario deltacon la creaci para la Armada. Enfrentar a Estados concesionados, asociados a empresas globales, como la Exxon Mobil es una modalidad de asimetría de potencialidad bélica, escudada bajo un tejido legal comercial, en que lo privado se vale de lo público, aumentando su poder de maniobra. El gobierno guyanés ha manejado con maestría esta posibilidad. La trata de personas, la minería ilegal, el contrabando de combustible  elevan la violencia y peligrosidad en aquellas regiones.

CONCLUSIONES

Las fronteras son indicadores de equilibrio de poder, soportada por la estabilidad de fuerzas, minimización de consecuencias por causa de contingencias, o la capacidad de responder a ellas. Las fronteras trascienden la demarcación y los hitos. Las interacciones potenciales (política, económica, seguridad, social, limitaciones pendientes, escenario geopolítico histórico y actual) pasan a convertir una complejidad por su misma naturaleza en una complicación de interretroacciones infinitas, que ofrecen varias posibilidades de respuesta, podríamos mencionar dos, una programática (planes quinquenales, políticas que varían con cambios de gobierno, etc.), y otra estratégica. La primera está relacionada con la concepción cartesiana de abordar el mundo, que es una formación arraigada en  occidente, que consiste en la disyunción y simplificación, y que hoy en día no responde a una realidad intrincada, lo que se transforma en una paralización, la nugatoria evasiva de la realidad, y una incapacidad de solución. La segunda, está referida a una manera más adecuada de abordar la complejidad desde lo complejo, como es el pensamiento estratégico.

La presencia sistemática - racional  de la Armada en los espacios fluviales y en la fachada Atlántica, comenzó una nueva etapa a mediados de los años 60, en consonancia con la nueva y muy compleja realidad geopolítica de una zona, donde la tradición operacional de nuestros marinos de guerra, se remonta de manera casi ininterrumpida desde 1730. Esta presencia moderna está ligada a cronologismos lineales y también, tal como hemos indicado, a la complejidad cuantitativa determinada por un sin número de interacciones de eventualidades, indeterminaciones y fenómenos aleatorios, algunos relacionadas con el azar y densificación de los relacionamientos de estas indeterminaciones[79] que obligaron al estratega naval a establecer un pensamiento operacional de lo complejo a lo complejo, limitado por lo presupuestario y la indisponibilidad política de asumir el compromiso histórico del momento.

Los retos son enormes, de una dificultad que este formato no soporta. Pero, con el favor del destino que nos ha deparado el soberbio Orinoco y el inmenso Atlántico, sabremos enfrentar el reto de frenar el expolio y las apetencias jamás saciadas de las potencias y sus alter ego, las compañías globales y países sin historia propia.






[1]Mi agradecimiento al Dr. Javier Nieves Croes, CA José Villafaña Valdivieso y CF Domínguez Chaparro por su invalorable aporte.
[2]Armada de Venezuela. Estado Mayor General. Archivo Antiguo. Apreciación Naval de la Reclamación del Territorio Esequibo. Caracas, EMGAR, 17 de junio de 1991.
[3]Ibídem.
[4]Ibídem.
[5] Roberto Palacios, Informe sobre la Cuenca Baja del Orinoco, Caracas, 29 de octubre del 2014.
[6] Desde sus desembocadura en el río Orinoco hasta el Mururuma es venezolano, desde allí hasta su nacimiento se encuentra en la Zona en Reclamación. Fue internacionalizado por el Laudo Arbitral.
[7] El río Amacuro desde su desembocadura en el Orinoco hasta el caño Joyoba (Haiona para los ingleses, Siburubana para los Warao)  es venezolano, desde allí hasta su nacimiento parte límites con la Zona en Reclamación. El Laudo Arbitral le declaró abierto a la navegación internacional.
[8] Suplemento al Libro Amarillo, de los Estados Unidos de Venezuela, presentado al Congreso Nacional en 1899.  Arbitraje sobre los Límites entre Venezuela y la Guayana Británica. Argumento de Venezuela, traducido al inglés. Caracas, Tipografía Universal, Talleres al Vapor, 1899, Tomo IX, pp.170-178.
[9] Este  concepto se fundamento en el Estudio de las "Puertas o Abras" diseñado por el Ingeniero Militar Agustin Crame ( Juan Manuel Zapatero, La Guerra del Caribe en el siglo XVIII, San Juan de Puerto Rico, Instituto de Cultura Puertorriqueña, 1964, pp. 7–9), aserto que  ha sido expresado cronológicamente y sin que sea exhaustiva la lista por la Venezuela Boundary Comission de 1896, creada por el Presidente estadounidense Grover Cleveland; coincidente con la opinión del embajador Roberto Palacios y la Armada de Venezuela en su "Apreciación Geoeconómica y Geoestratégica de los Escenarios de Actuación de la Armada (1999-2010)" .
[10]Armada de Venezuela. Estado Mayor General. Archivo Antiguo. Apreciación Naval de la Reclamación del Territorio Esequibo. Caracas, EMGAR, 17 de junio de 1991.
[11] Roberto Palacios, El Expediente 2997 del Ministerio de Relaciones Exteriores de los Países Bajos referente  a los límites entre Venezuela y la Guayana Esequiba, Caracas, se., 2015.
[12] Por causa de infundadas pretensiones de los holandeses para pescar en las bocas del Orinoco (1769), además del testimonio del Almirante   José Iturriaga, el Consejo de Indias, máximo organismo rector de las colonias, afirmaba, que los holandeses nunca habían tenido posesión de los terrenos que iban del Esequibo al Orinoco y que lo único que estos tenían  era “...una barraca de paja a la orilla oriental del Moruca (....) que se les había tolerado de 40 años a esta parte, para impedir la deserción de sus esclavos cuyo permiso degenero luego en el inicuo comercio de comprar a los crueles caribes los indios que esclavizan... Agregaba este gobernador que, los holandeses tampoco tenían jurisdicción sobre el Mazaroni, y razona que si los holandeses estuvieran en posesión de todos los cursos de agua que iban del Esequibo al Orinoco, poseyeran más territorio de Guayana que los españoles. Además dice que los subditos holandeses solamente tenían posesión legítima de los ríos, Surinam, Corentin, Berbis, Powaron, Esequibo, Cupernam y Demerari. Yasser Lugo, LA DEFENSA DE LA TIERRA DEL AGUA (Introducción a la defensa territorial en la provincia de Guayana, 1754-1817, Sevilla, Universidad de Sevilla, 2003. Para ampliar información sobre el tema Vid. Jairo Bracho Palma, La Defensa Marítima en la Capitanía General de Venezuela (1783/1813). Caracas, INEA, 2006..
[13]Armada de Venezuela. Estado Mayor General. Archivo Antiguo. Apreciación Naval de la Reclamación del Territorio Esequibo. Caracas, EMGAR, 17 de junio de 1991.
[14]Vid. Roberto Palacios, "La Desintegración de la Gran Colombia" en Iconología Naval Venezolana, V II, en proceso de edición.
[15] Armada Bolivariana. Estado Mayor General. Archivo Antiguo. Apreciación Geoeconómica y Geoestratégica de los Escenarios de Actuación de la Armada (1999-2010), Caracas, Marzo de 1999.
[16] El general Daniel O´Leary, edecán del Libertador, prócer de nuestra Independencia, fue uno de los principales instigadores para la invasión del Reino Unido a la Guayana, siendo cónsul británico en Venezuela. En carta detallada  del 4 de agosto de 1841 dirigido  al Gobernador de la Guayana Británica Henry Light, explica la importancia para su país, la posesión  Punta Barima.
[17]Las minas de Imataca fueron descubiertas en 1895. En 1894 habían 10 yacimientos comprobados.
[18] Paul Simoes de Caravhalo, ¨Gunboat Diplomacy on the Orinoco¨ in Naval History Review, US. Naval Institute, V. 17, Nº 4, pp. 424-46.
[19] Informe de los Ingenieros del Ejército Norteamericano sobre el Orinoco y Amazonas, 1944.  Industrias Higging, Informe de los Ingenieros Higging, Nueva Orlan, 30 de octubre de 1944.

[20] El Reino Unido le otorgó la independencia el 26 de mayo de 1966.
[21]Armada de Venezuela. Estado Mayor General. Archivo Antiguo. Papeles de Guayana. Caracas, EMGAR, 17 de junio de 1991.
[22] Creada por real cédula del 28 de mayo de 1783 y la real  orden del  19 de mayo del mismo año.
[23] El sistema de cruceros fue inventado por los vascos de la compañía de Caracas observando los hábitos de los contrabandistas.
[24] Ibidem.
[25]AGI. Caracas, 478. Plan que supongo yo, Don Vicente Antonio Icuza, comandante por su majestad  de los Guardacostas de esta Provincia, 28 de abril de 1784.
[26]Instrucción que deberán guardar el comandante, capitanes y demás oficiales empleados en el corso que la Real Compañía Guipuzcoana hace con real facultad en los mares desde el río Orinoco hasta la Hacha que emite el capitán general de Venezuela José Carlos Agüero para la vigilancia también del Mar de Venezuela, 20 de julio de 1771, artículos 4º y 5º. Ministerio de Relaciones Exteriores, Títulos de Venezuela en sus límites con Colombia,  Caracas, Editorial Arte, 1979, Tomos I-II, serie B, pp. 81–82.
[27]  Publicado el 28 de abril de 1789. AGI. Caracas 23. Instrucciones de Guardacostas que deben observar  y guardar los capitanes, patrones y demás empleados en los buques menores y lanchas del Corso y Resguardo Marítimo que mantiene el Rey en estas provincias, 28 de abril de 1789.
[28] AGI. Caracas, 784.  Instrucción que deben observar el comandante general, los capitanes, oficiales y demás empleados en los buques del Resguardo Marítimo que mantiene el Rey en la Provincia de Venezuela, sus agregadas, e islas adyacentes, 4 de Abril de 1799.
[29]Para entender sobre el tema de corrientes y mareas y su influencia en la navegación a  vela, vide :Derrotero de las islas, de Costa firme y Seno mejicano, Madrid, Imprenta Real, 1810. Resultado impreso de la comisión del Atlas iniciada en 1794.
[30]AGI. Caracas, 839. Testimonio de los autos obrados por la aprehensión de unos efectos de ilícito comercio ejecutada por la piragua “San Esteban” agregada al balaux “Rambli” del corso de SM. el 16 de junio de 1797 en el caño Macareo del río Orinoco.
[31] AGI. Caracas, 510. Testimonio  de los autos obrados a instancia de Don Ignacio Berra armador del corso de Guayana  sobre que se declaren los derechos que deben contribuirse a la Real Hacienda por los efectos especies apresados, 26 de enero de 1801. AGI. Caracas, 96.  El capitán general de Venezuela, 31 de julio de 1800.
[32] Yasser Lugo, LA DEFENSA DE LA TIERRA DEL AGUA (Introducción a la defensa territorial en la provincia de Guayana, 1754-1817, Sevilla, Universidad de Sevilla, 2003.
[33] AGN. Intendencia de Ejército y Real Hacienda, T. CXXI. Borrador para Matheo Hernández Ocampo, 24 de marzo de 1797, f. 177. AGN. Intendencia de Ejército y Real Hacienda, T. CXXII. Mateo Hernández Ocampo para el Intendente de Caracas, Barrancas Coloradas, 7 de abril de 1797, f. 46.
[34] AGN. Intendencia del Ejército y Real Hacienda, T. CXLV. El intendente de Guayana al superintendente de Caracas, 18 de julio de 1799, f. 313. Ibidem. Don  Felipe Inciarte, sobre la compra de cañones al norteamericano Keyran Walsth, 4 de julio de 1799, f. 160.
[35] AGI. Caracas, 802. Instancia de  Don Juan Jurado, 2 de septiembre de 1802.
[36] Lugo, LA DEFENSA DE LA TIERRA…, 2003.
[37] AGI. Caracas, 567ª. Libro de Caja de Caracas, 1802, 10 y 25 de  enero. AGI. Caracas, 637ª. Libro Manual de las cajas de Puerto Cabello, 1805, 4 de marzo. AB. Expediciones, 37.  Estado general de los buques mayores y lanchas que se hallan  en este Apostadero con destino de Guardacostas y Golfo de Venezuela cuyo término es desde cabo de la Vela al río Orinoco, Puerto Cabello, 14 de febrero de 1805. 
[38] AB- Expediciones, 37-108. El brigadier Agustín de Figueroa. Estado que manifiestan las embarcaciones  apresadas por los buques guardacostas de la provincia de Venezuela y sus líquidos valores, Puerto Cabello, 8 de mayo de 1805.
[39] AB. Corso y Presa,  5233.  Depósito de los caudales que de la venta  de presas hechas en el río Orinoco se ha hecho cargo el oficial 4º del Ministerio de Marina, Don Francisco Saavedra, 7 de julio de 1809.
[40] Ibidem. AB. Cuerpo General, 620, tomo 982. Hoja de servicios de Don Antonio  Quintano.
[41] Para ampliar este aspecto Vid. Seguridad en los Espacios Fluviales, Caracas, Armada de Venezuela - Escuela Superior de Guerra Naval, 1987.
[42] Bolívar a López Méndez, Angostura, 20 de noviembre de 1817, en Obras de Simón Bolívar, Caracas, CANTV, 1982, T. I, p.279.
[43] Francisco Alejandro Vargas, Historia Naval de Venezuela, Caracas, Imprenta Naval, 1994, T. III, p.39.
[44] Otros comandantes de Apostadero de Guayana: CF José María Lanz (1830-1831 y 1836-1839). AN José de los Santos Cardoso (1831-1835); CF Jorge Gutiérrez (1845- ?) ; CF Juan Antonio Echeverría, Comandante y Capitán de Puerto de Ciudad Bolívar (1864). Lista no exhaustiva.
[45]AGNV. Ministerio de Guerra y Marina, legajo Nº 03-03-09-27-360. El Director de Guerra al Genera Manuel Urrutia. Caracas, 5 de octubre de 1888.  El Director de Guerra al coronel Benjamín Díaz. Caracas., 21 de agosto de 1888.
[46] AGDGSLAF, 4.1.45. Borrador de trabajo del Canciller Gil Borges, posiblemente de 1936.
[47] Ibidem.
[48] Ibidem.
[49] Ibidem.
[50] Para mayor información Vid. Alfredo Schaell y Fabian Capechi, De Babor a Estribor. Reseña de la Navegación en Venezuela, Caracas, Fundación Museo del Transporte, 2012.
[51] Ministerio del Poder Popular para las Relaciones Exteriores. Dirección General de Fronteras. Archivo. Documento 8.1.18. Román Valenzuela al Gobernador del Delta Amacuro. Amacuro, 15 de enero de 1946.
[52]Ramón Rivero Blanco, “Las Lanchas Torpederas M.A.S. en Venezuela. Cronología de un Experimento” en Iconología Naval de Venezuela. Tomo II. En proceso de edición.
[53] Ibidem.
[54] Documento “INSPECCION DE LAS LANCHAS GUARDACOSTAS EN CONSTRUCCION PARA EL GOBIERNO DE VENEZUELA”, septiembre 1939, Referencia AGN 03-01-1.4-B-0454 (9)
[55] Armada Bolivariana. Estado Mayor General. Archivo Antiguo. Resoluciones, Decretos y Nombramientos. CE -030-CO-0168.
[56] Resolución  Nº 202 de citada fecha. Armada Bolivariana. Estado Mayor General. Archivo Antiguo. Resoluciones, Decretos y Nombramientos. CE -030-CO-0168.
[57]Resolución  Nº M-210 del 24 de julio de 1969. Armada Bolivariana. Estado Mayor General. Archivo Antiguo. Capitán de navío Tito Livio Zavarce León; capitanes de fragata Rafael Arraiz Espejo,  Eneas Rivas ,  José Vaca Amaya,  Luis Ramírez Acevedo; capitanes de corbeta  Fernando López Ramírez, y  Jorge Navas Martínez.  Informe Sub Sector de Defensa Naval, Caracas, agosto de 1972, p. II-101.
[58] Ibidem.
[59] Ibídem.
[60] La Oficina Central de Coordinación y Planificación de la Presidencia de la República, creada por el decreto Presidencial No 492 del 30 de diciembre de 1958, para formular  e instrumentar la estrategia del desarrollo económico social del país.

[61] CF Manuel Antonio Vega, Memoria. Política y Programa Naval, Caracas, Escuela Superior de Guerra Naval, 1962.
[62] Armada Bolivariana. Estado Mayor General. Archivo Antiguo. Ante proyecto Organización de la División Marítima Territorial del País, Caracas, marzo de 1966.
[63] "La Marina en la Conquista del Sur" en Correo de la Armada, Caracas, Marina de Guerra, 27 de abril de 1972, pp. 8-9.
[64] Alto Orinoco: espacio entre el nacimiento del río y el raudal de los Guaharibos. Medio Orinoco: se extiende 750 kilómetros, desde el raudal de los Guaharibos al de Atures. Bajo Orinoco: se extiende 950 kilómetros, desde Atures a Piacoa.
[65] Armada Bolivariana. Estado Mayor General. Archivo Antiguo. Exposición de Motivos para sugerir la creación de un sistema de apostaderos fluviales en el cono sur del país. Elaborado por el CN Julio César Fernández Fossi, Caracas, Estado Mayor Naval, junio de 1972.
[66] Armada Bolivariana. Estado Mayor General. Archivo Antiguo. VA Jesús Bertorelli  Moreno al Ministro de la Defensa. Oficio 12025. Caracas, 7 de septiembre de 1982.
[67] Armada Bolivariana. Estado Mayor General. Archivo Antiguo.  Jefe de la Tercera División al Jefe del Estado Mayor Naval. Informe Administrativo 0003 del 04OCT83.
[68] Armada Bolivariana. Estado Mayor General. Archivo Antiguo. VA Jesús Bertorelli  Moreno al Ministro de la Defensa. Oficio 5812. Caracas, 26 de abril de 1982.
[69] Armada Bolivariana. Estado Mayor General. Archivo Antiguo. VA Haroldo Rodríguez Figueroa. Plan Quinquenal de Desarrollo Fronterizo. 1983.
[70] Armada Bolivariana. Estado Mayor General. Archivo Antiguo. VA Víctor Méndez Rea. Cuenta OR-EMTD-0001. 1984.
[71] Armada Bolivariana. Estado Mayor General. Archivo Antiguo. Director de Operaciones del EMGAR. Nota Informativa  del 11SEP84.
[72] Entregado el 20 de enero de 1984.
[73] Entregado el 2 de abril de 1984.
[74] Armada Bolivariana. Estado Mayor General. Archivo Antiguo.  Jefe de la Tercera División al Jefe del Estado Mayor Naval. Informe Administrativo 0003 del 04OCT83.
[75]"XII aniversario del Transporte Margarita “ en Correo de la Armada, Caracas, febrero de 1996, p. 8.
[76] Elías Daniels, "Seguridad en los Espacios Fluviales" en  Seguridad en los Espacios Fluviales, Caracas, Armada de Venezuela - Escuela Superior de Guerra Naval, 1987, pp. 82- 83.
[77] Fuente: Dirección de Operaciones del Estado Mayor General.
[78] Fuente: Dirección de Operaciones del Estado Mayor General. Dr. Javier Nieves- Croes.
[79]Cronologismos lineales: 1) La progresiva criminalización del enemigo, presente en dos bloques ideológicos, y que la subsiguiente unipolaridad aumentó de manera geométrica; 2) El movimiento insurreccional de izquierda, en parte, consecuencia del primero; 3) La formalización de las nuevas formas de interacciones marítimas que la Conferencia del Mar inició en las comisiones preparatorias y que quedan establecidas en 1958. Esto formó un entramado de contradicciones que se hace evidente en la nueva política naval de las potencias. Interacción de eventualidades. Algunos, consecuencias de los cronologismos lineales: 1) La fragmentación institucional de la Armada en 1962,  abrió un importante escenario  de conflicto interno al existir un ala de izquierda; 2) La denominada "amenaza comunista" en la nueva República de Guyana; 3) La política  de las potencias, especialmente Canadá, Reino Unido y los Estados Unidos de preservar sus reservas naturales y minerales a costa del deterioro ambiental de sus proveedores, y garantizar rutas poco complicadas de materias primas hasta sus centros industriales; 4) El apoyo venezolano a Argentina durante su enfrentamiento con Gran Bretaña, fue causa de alejamiento del mundo anglosajón, circunstancia que aprovechó el Gobierno Guyanés para involucrar nuevos actores en el conflicto limítrofe. Fenómenos aleatorios: 1) Las potenciales económicas, de capacidad aeroespacial, y materiales estratégicos en el sistema deltaico; 2)  Las potencialidades delictivas en vista del abigarrado sistema de caños y salidas al Atlántico captó la atención de actores de diversa naturaleza. Lista no exhaustiva.

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